Ayer fue a cenar con una amiga que vino de Mallorca y quedo encantada con el restaurante. La carta es variada y tienes mucho donde elegir. Os recomiendo algo para compartir y después un principal. Y dejad sitio para el postre porque no os va a defraudar la carta. Todo un acierto.
Juan Carlos Martinez Escribano
+5
Muy bueno, buena atención y mucha oferta sin altos precios. El vino montenoble muy bueno
Salimos super contentos con la experiencia, muy amables, la comida buenísima y gran cantidad. La cuenta fueron solo 26€/2 personas y pedimos tres tapas (muy grandes) y dos bebidas.
Nos quedamos con las ganas de probar los postres pero estábamos realmente llenos. La próxima dos tapas y postre!
La fotos es de dos tapas (tortillas melosa y croquetas de gambas rojas) porque de los huevos rotos se los olvidó, pero era enorme y buenísimos!
Nos sentamos a tomar algo y nos trataron tan bien que nos quedamos a comer, llevándonos una gratísima sorpresa. Tanto Carlos, el camarero que nos atendió, como Mónica, fueron unos amores. Las croquetas de gamba una locura y no te vayas sin probar el canelón, maravilloso.
¡Qué gran descubrimiento!
Hemos pedido el Menú Premium, todo lo que hemos comido estaba realmente delicioso y con una presentación muy cuidada. A modo de recomendación si que falta decoración en los postres.
Buena relación calidad-precio.
Claudio el camarero que nos ha atendido, ha sido muy atento y amable con nosotros durante todo el servicio y es de agradecer.
Hemos disfrutado de una gran velada.
El local es muy grande, desde fuera no lo aparenta, tiene 2 plantas.
La carta es muy variada y la relación calidad precio es muy interesante.
Pedimos varios platos a compartir y los fueron trayendo poco a poco para disfrutarlos sin prisas. Destaco el pulpo, los chipironcitos y el lomo con queso brie.
El servicio es atento y eficaz.
Me encantan todos los restaurantes de este grupo. Comida buena, atención excelente y rápida, y precios estupendos. La decoración hace del lugar muy acogedor. Tienen una carta variada con diferentes recetas. Son bastante flexibles con la hora. Llegué pasadas las 15.30 y me dijeron que no había problema, cuando en los restaurantes de la zona ya no nos dejaban sentarnos. He visto alguna reseña de este restaurante de una estrella y puedo decir que no se la merece. He comido prácticamente en todos los restaurantes del grupo. Madrid-Barcelona-Costa Brava, y varias veces. No dado con ningún camarero borde ni tampoco con platos de mala calidad. Obviamente no es alta cocina.
Una verdadera sorpresa. Los platos merecen la pena. Suficiente cantidad y exquisito sabor. La ensalada de aguacate es la única que se quedó un poco insulsa en comparación al resto que son un verdadero placer. Pero teniendo en cuenta que son realmente excepcionales. Volveremos siempre que estemos por la zona. Como mañana mismo vamos a estar...
Mañana mismo repetiremos!!!
Un placer.
Es recomendable reservar para asegurar tener mesa. El tamaño de las raciones está bien, al igual que la calidad de los productos. Éramos 6 y pedimos varias cosas para compartir y un plato cada uno. Destacar El arroz negro y los púlpitos como buena elección. Sin embargo, aunque las croquetas están buenas son algo pequeñas, parecen medias croquetas. En cuanto al espacio, los salones son amplios, con una planta principal y otra inferior, que es donde están los baños. La atención del personal no es de los más destacable del restaurante.
Comida muy bien elaborada y rica.
Local de diseño muy cuidado.
Menú a 19€ muy interesante.
Camarero educado y profesional.
No me gustó que la última vez que fuimos me quisieron cobrar 11€ de los postres incluidos claramente en el menú.
Revisé la cuenta, si no me la cuelan y no me pareció despiste🤔.
Buen lugar para comer en el centro de Madrid, con una correcta relación precio calidad. Platos abundantes. Buena opción de menú ejecutivo. Pedimos pan con tomate, burrata con mango y tomate, bacalao gratinado, camarones con arroz frito y tin bao de postre, con dos cañas (37 euros). Los platos bien presentados y la atención rápida.
Buscábamos un sitio para comer y llegamos muy tarde, casi a las 16h. Se portaron muy bien y nos hicieron un hueco por no dejarnos sin comer. Éramos 4 y pedimos varias cosas a compartir al centro: patatas la caña, verduras a la plancha con salsa romescu, calamares y croquetas. Después, de segundos a compartir, un tataki de atún y un entrecot. Si tuviera q seleccionar la mejor de cada: patatas la caña y el tataki. De postre probé el Tim Bao, helado de turrón con crema por encima y crujiente de caramelo y, aunq por los ingredientes pensaba q no me iba a hacer mucha gracia, estaba espectacular. Sumale 1 botella de vino y 4 cañas = 25€ pax. Precio muy ajustado para su localización y calidad.
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