Simplemente delicioso. La introducción del aguacate en todos sus platos está muy bien lograda; el concepto en general tiene un punto que los diferencia de otros restaurantes de la zona.
Lo mejor sin duda ha sido la tostada de burrata, espectacular! La combinación de salsas en las brochetas de salmón también es de diez.
Bastante contentos con este templo del aguacate... buena comida, buen servicio y por poner alguna pega...las mesas son un poco estrechas y se hace un pelin incómodo comer...pero la originalidad de sus platos y la rapidez del servicio hacen que merezca la pena..
Recomiendo para el postre La bomba.
Los precios, siendo objetivos, me parecen un poco caros...
Siempre que vamos nos atienden muy bien. Lo mejor la tosta de jamón.
Puedes pedir de la carta o pedirte el menú “brunch” nosotros ya hemos probado casi todo.
El aguacate está siempre en el punto perfecto y con un sabor genial! Nos ENCANTA.
Un restaurante pequeño, pero precioso y muy acogedor. La comida excelente, platos muy bien presentados y a cual mejor, y el trato inigualable. Ya he estado tres veces y seguiré volviendo siempre!
Original ya que todo lleva aguacate, la comida muy buena, el trato bueno aunque te preguntan demasiadas veces qe tal estás. Eso si, podían haber avisado que para 3 personas habíamos pedido demasiado. Pero un sitio al que volver.
Restaurante informal pero muy acogedor. Comida muy bien presentada y original el modo de servirlo en tablas de cortar. La decoración del local está muy currada y el sitio es muy tranquilo. Muy recomendable!
El sitio está muy bueno y la atención fue excelente. Comimos los tacos de atún, tosta de salmón, arepas de cochinita, la burra y el pie de limón.. todo estaba muy bueno.
Buena comida creativa en un local agradable con el personal muy amable. Para repetir y probar toda su carta!
J. Antonio Solórzano P.
+4
El hummus de aguacate tenía un sabor fuerte avinagrado, el guacamole casero con chips tenía exceso de sal y la yuca frita como entrada la mejor elección. Las hiedras de plástico colgadas en el rest le quitan por completo un ambiente tan natural como el aguacate, echamos en falta variedad de postres, solo tenéis helado de aguacate. El servicio al cliente, la rapidez en servir los platos y el precio lo mejor de la experiencia. Sin duda repetiremos
Restaurante pequeño y acogedor con comida con buenos ingredientes y con sabor. El guacamole estaba buenísimo ademas tienen el detalle de ponerte los condimentos separados por si acaso no te gusta alguno de ellos que puedas no echartelo. Me gustaría que nos hubieran puesto mas nachos ya que se quedaban un poco cortos. Las brochetas de salmon fueron toda una sorpresa ya que pensabamos que iban a ser a la plancha pero sin embargo fueron un taquito de salmon crudo con gran sabor
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