Lugar con encanto propio, tranquilo y con un gran equipo muy profesional, cuidan hasta el mínimo detalles así como cualquier intolerancia alimentaria que tengas que tienen en cuenta desde el momento que entras por la puerta. Experiencia de 10!!! Enhorabuena.
Nos vemos pronto y con mas tiempo para poder seguir disfrutando de su cocina.
Me gustaba más anteriormente con los platos antiguos pero sigue estando bueno.
El lugar es precioso y el servicio es extra amable.
Un de los sitios que frecuento porque me gusta todo
Una pena que hayan quitado el postre helado de té verde
Recomiendo las vieiras
Nunca había ido a un japonés así ya que es como la típica taberna japonesa y no el típico japonés de sushi, y fue un acierto brutal.
Estaba todo buenísimo pero recomendaría el Tsukune albóndigas de pollo con yema de huevo, las bolas de pulpo, la sopa miso y especialmente el tuétano con tartar de atún, aparte que no puede faltar un mochi de postre.
El sitio es súper bonito por dentro y si estás en barra, ves por la cristalera toda la cocina, y la atención de David fue genial, nos lo expicó todo a la perfección ya que era nuestra primera vez en un sitio así.
No es un sitio barato pero merece totalmente la pena, para repetir.
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