¡Altamente recomendado! Este lugar ofrece productos frescos de alta calidad con una excelente relación calidad-precio. El trato es cercano, cordial y profesional al mismo tiempo. Es un negocio familiar que transmite el cariño y la dedicación con los que trabajan. Ideal para disfrutar sin prisas. Son entusiastas tanto de Messi como de Sabina. ;)
Ufff!!!, buenisimo, la calidad del producto extraordinaria y la atencion de Roberto genial.
Felicidades!!
Imprescindible cuando vuelva a Zaragoza.
Buen producto, buen servicio y precios en consonancia pero equilibrados. Trabajan marisco y pescado fresco de temporada. Totalmente recomendable. En la nueva zona de moda de tapeo (Manuel Lasala/Catania/Bruno Solano). Los jueves tarde hay Juepincho San Bruno por toda la zona.
Espectacular. Buen producto, tratado con mimo, con el punto justo de plancha y un precio más que razonable. Merece la pena esperar un poquito entre plato y plato ( lo justo para que salga recién hecho) y disfrutar del marisco recién sacado de la plancha... La atención inmejorable, buena gente que sabe lo que hace y te trata como de la familia. El precio más que razonable. Solo le falta poder oír el rumor del mar...Se ha ganado un lugar en nuestra lista de favoritos...
M. Jesús Sánchez Fuertes
+5
Un sitio estupendo para disfrutar de buen producto (pulpo, gambas, santiaguiños, berberechos, entre otros) tratado con esmero. Todo recién hecho!! Buen trato y espacio limpio y ventilado. Para repetir y recomendar.
Raciones no muy gtandes, pero espectacular calidad precio. El pulpo se desace en la boca, las zamburiñas y las gambas al ajillo brutales. Merece mucho la pena ir.
Buenísima toda la comida y de gran calidad. Y el mismo sabor que recordaba del " antiguo" scualo. De precio muy adecuado también. El camarero muy amable. Deseando volver
Pescado muy fresco, y de alta calidad.
Javier en cocina un gran profesional, que cubre de sobras lo que esperas.
Estaría bien que tuviesen unas chupadedos para cuando vas a tomar sólo un vino.
Roberto domina la sala, con un excelente carácter y demostrando ser un experto en pescados y simpatía.
Las chupadedos ya llegaron hace bastantes semanas y están deliciosas.
Producto de primera: las navajas son espectaculares. Hemos probado también las sardinas y los chipirones, y lo mismo. La atención además es de lujo. El precio es ajustado para la calidad.
Es difícil imaginar una calidad de marisco y productos del mar frescos así a precio equilibrado y en un bar muy cómodo y pequeño pero sin ninguna ínfula. Acabo de volver a la ciudad, paseando a 40 grados buscando donde comer lo he encontrado, y qué bien.
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