Buen sitio para parar y comer. La verdad que está muy bien todo con buen acceso y todo genial, la comida con abundancia y decente pero queda un poco de desear el trato, si que es verdad que nos han tratado bien pero de una forma un poco rara, no sé quizá el ponerle un poco más de ganas a tu trabajo… pero bueno, luego con los postres nos han dicho 4 de los 15 que había… (es un ejemplo, realmente no sabemos todos los que habían) pero escuchamos a otro camarero distinto a nuestra camarera, decirlos a la mesa de al lado todos los que habían después de que nosotros ya habíamos pedido… y bueno, hay que mejorar eso un poco, por lo demás, genial. Tanta comida que no pudimos con todo.
Buen sitio para comer. Comedor grande y muy luminoso.
Comimos menú cachopo y plato de lubina a la brasa. Ambas cosas ricas.
He echado de menos platos típicos de la zona.
Buen servicio: personal atento en todo momento de sí estaba todo a nuestro gusto.
La torrija muy rica también.
⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️
Un restaurante situado en un área de servicio muy cerca de la A-3 a la salida de Saelices. Está junto a una gasolinera y hay enfrente una zona de aparcamiento con sombra.
El restaurante está muy bien, al contrario que otros que se pueden encontrar en esta misma autovía.
Tienen dos comedores, uno más informal para tomar algo rápido y otro comedor más amplio y luminoso para comer de menú.
Tienen una cierta variedad de raciones y bocadillos y hay, también, un menú diario a unos 12 euros, con varios primeros, segundos y postre. Las carnes las hacen a la brasa y están muy buenas. Los platos son abundantes, así que no te quedas con hambre.
El servicio es rápido, y atienden con amabilidad y profesionalidad.
Un restaurante de "carretera" en el que se come muy bien y con una buena relación calidad-precio.
Situado en la entrada (o salida) de Saelices, descubierto por pura casualidad, ya que se encuentra cerca de Madrid, y, teniendo claro que es un bar de carretera, me ha sorprendido muy gratamente. El café, excepcional, la tortilla de patata sin cebolla y el exquisito trato de las chicas de la barra me han conquistado. Volveré cuando tenga oportunidad.
Un lugar maravilloso para hacer una parada en tu viaje, atención de 10 y comida más que sustanciosa. Muy contentos con el lugar
El restaurante está muy bien situado,con un buen acceso desde la A-3.Disponen de un amplio parking vigilado frente a la gasolinera.Los responsables del establecimiento son muy atentos y amables,lo que más falla a mi parecer es la comida, alomejor dio la casualidad que no me acertaron ese día,de todas formas, volveré para comprobar si fue un caso aislado.Eso si,el precio muy bueno y te ofrecen una tapa generosa con la cerveza.
Parada antes de llegar al aeropuerto de Madrid para almorzar y sorpresa con el súper bocadillo y pincho de tortilla de patata recién hecha. Camarera súper amable y un trato excelente. Recomendable 100%
![5]( "Recensione")
Éramos dos y comimos muy bien, entrada mesas de picoteo o a la derecha mesas para menús o carta, con vista al paisaje, cogimos el menú cachopo de 15,95€cada una, fue una buena elección, ensalada mixta ahumada para dos deliciosa, de bebida dos cervezas 0'0 Estrella Galicia tostada (para mí una de las mejores cerverzas bien fría), un cachopo de 500 gramos para dos muy bueno, con todos sus ingredientes, acompañado de papas y pimientos verdes fritos..
Pedimos antes de entrada unas patatas bravas con una salsa riquísima pero las patatas estaban mal echas estaban crudas (ni cocidas ni fritas como deberían estar) nos las llevamos para cenar y ahí nos dimos cuenta que un poco mal..
Si no tenian que hubieran dicho que no habían y no vender por vender y pagar 7€. Es lo único.
Y el postre delicioso una tarta red velvet riquisimaaa.
El sitio muy bien, el restaurante fue una buena elección, ya que estuvimos viendo en el Parque Arqueológico de Segobriga, muy bien también y mire por internet y me salieron tres pero tenemos ganas de comer parrilla y eso fuimos a este.
Trato inmejorable. Estuve comiendo allí el sábado 30 de septiembre y todo impecable. Deje la moto allí aparcada y los chicos del restaurante se preocuparon de vigilarmela hasta que a las 3 de la mañana volví a por ella. El camarero de la noche muy simpático y profesional, estuvimos hablando mientras él estaba con sus tareas sobre boxeo y fue una conversación muy entretenida. Gente así es de admirar. Parada obligatoria si estás de paso
Sitio de parar en carretera estupendo para comer, fresquito y x menú de 12€ con postre incluido y destacar el trato de las camareras María, Bego y sobre todo Bea, profesional y alegre q es de agradecer y eso no se reconoce en la nómina. Atenta a lo q falta en cada mesa y rapidez en su trabajo las 2 veces q he parado.
El revuelto de setas o la ensaladilla y alcachofas de primero muy ricos, los segundos platos más flojos.
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