Las Mulas

Hoy he ido a comer a este restaurante de la plaza de las flores, me atendió un señor llamado Alvaro que se comportó muy bien y tuvo un trato exquisito y el señor de la barra llamado Juan también nos atendió increíblemente increíble, y seguidamente el camarero Francis tuvo un comportamiento espectacular, muy recomendado, tanto por sus trabajadores y como su comida, no tengo más palabras que decir fantástico

Muy buena comida en calidad y cantidad. La atención fue un poco lenta pero el local estaba completo. Espectacular el pulpo que nos pusieron. Recomiendo la reserva si es para come o cenar puesto que sino no encontrarás sitio. La atención del personal fue buena, sin duda repetiremos para probar otros platos. Los caballitos han sido los mejores que he comido, son muy grandes y tienen un rebozado muy bueno. El pulpo está crujiente y lo sirven en una salsa riquísima. La decoración, los platos está todo cuidado al detalle, es un local grande y cuidado de cara al público.

Una de los bodegones con más solera de Murcia. Desde luego una elección adecuada para disfrutar de los mejores productos de la huerta murciana. A destacar por encima de todo el secreto de cerdo adobado y asado de forma tierna y sabrosa. Su ensalada con tallos de tapenas, tomates, atún y su aliño es más que suficiente para cerrar los ojos de placer al degustarla. No dejen de probar los caballitos, sus croquetas, pulpo asado, alcachofas y su postre de paparajotes con su café de puchero. El servicio excelente, rápido y atento a pesar de ser el día del bando de la huerta. No obvies esta taberna con mucha solera al visitar Murcia.

Las Mulas, un restaurante de comida tradicional con un toque elegante, en pleno centro de Murcia. Me lo habían recomendado, pero no caí en reservar y al ser dos, aún llegando a hora punta un domingo, estuvimos tomando una caña en la barra y no tardamos en tener mesa. La verdad es que el sitio es muy acogedor y el servicio muy amable, con detalles dignos de comentar en esta reseña. La comida exquisita, desde platos típicos, como la ensalada murciana, migas, buñuelo de bacalao, la clásica marinera… hasta otros más elaborados, como la alcachofa con parmesano y jamón o pastel de calabacín gratinado. Todo ello acompañado con pan con pimentón y un Juan Gil rosado muy suave, el cuál me lleva a comentar un detalle digno de alabanza: al traer la cuenta, me chocó ver que la botella aparecía con un precio de 27€, cuando en la carta con el QR eran 19€, por ello, lo comenté y rápidamente me dijeron que habían cambiado los precios, pero dado que era una diferencia importante y no me habían avisado, nos respetaban el precio anterior. De verdad que fueron muy amables y en ningún momento me sentí engañada, sino todo lo contrario, Youssef, uno de los camareros, me repitió varias veces que hay que sentirse respaldado ante errores así y por supuesto, sentían el error en la cuenta. Ya que hablo del servicio, quisiera destacar también el excelente trato por parte del encargado, Fernando, pendiente en todo momento de que estuviésemos cómodas, y la camarera que nos atendió, Sana, que nos recomendó platos y ayudó en nuestra elección. En otra ocasión, no dudaré en reservar, pues fuimos afortunadas de poder conseguir mesa, pero las Mulas bien merece hacer una reserva para asegurar una velada murciana de calidad. ¡Gracias por todo y esperemos volver pronto! 😊