Sitio pequeño y muy agradable, tiene terraza cubierta. La comida típica cubana bastante exquisita. A parte de la carta también tienen sugerencias de platos. Recomiendo la ropa vieja, el cubanisimo y el guajiro 👌🏻. Para entrantes recomiendo los tostones, la yuca y los plátanos fritos. Día entre semana no hace falta reservar, fines de semana les aconsejo que llaméis. Están abierto todos los días menos los lunes. El personal son todos de cuba, personas muy agradables. Repetiría 👍
Muy sabrosa la comida y nos atendieron muy amablemente. Un sitio estupendo para probar la comida cubana. La ropa vieja sin duda es muy buena opción y el langostino con arroz y yuca frita también está delicioso.
Una grata sorpresa, la comida estaba buenísima y la atención muy buena.
El cordero con salsa de tamarindo sobre waffle de yuca no está en la carta, pregunta al camarero que está delicioso!
Alicia Martínez-Conde (aliziacomunica)
+5
ESPECTACULAR todo!!! Probé: cordero de pierna asada a baja durante 24h, servida sobre un gofre de yuca, salsa de tamarindo y huevo poché; ropa vieja y yogur con mango (tienen otros 6 postres tradicionales muy tentadores). Presentaciones y elaboraciones impecable. A seguir las recomendaciones de Alberto, camarero súper activo, simpático y servicial. Local para recomendar y compartir. Lo he descubierto en un repor del programa 'Aquí la Tierra' (TVE1) Vuelvo y vuelvo y vuelvo a seguir degustando todas sus sugerentes especialidades. Y precios imbatibles: los 3 platos mencionados + 1 cerveza, 2 cortados y un chupito de ron cubano -gentileza de la casa- + 34,39€. Gracias también a Rafael y equipo de Cocina!
Un restaurante cubano interesante. Comida típica y casera, bastante bien cocinada y la atención estupenda. Algo caro calidad-precio y con poca variedad de platos, pero recomendable.
Personal muy atento. Estaban a tope y nos hicieron un hueco para poder tomar algo. La comida que vimos salir tenía muy buena pinta.
Perfecto calidad/precio. Aquí no se pasa hambre. El servicio muy amable y simpático. Nos sirvieron la comida ensegudia y teniendo en cuenta que estaba lleno, es un punto a tener en cuenta. Presentación cuidada. Recomiendo el Pollo tropical, la ropa vieja y los tostones. Para beber he pedido un batido de guayaba y leche de coco 😋. Volveré otro día para pedir los postres caseros porque estábamos tan llenos que no hemos podido. Muy recomendable 🇨🇺
Restaurante muy pequeño que visite hace dos semanas aproximadamente.
Por suerte aunque fui para merendar, estaba totalmente disponible, dado que estaba completamente vacío, salvo por una persona que ya estaba terminando de comer.
La carta por desgracia es muy corta entre primeros, segundos y postres así como raciones (hacen un total de unos 25 elementos aprox. Si no son menos) No obstante el sándwich cubano, más conocido, no se hace los findes que, es cuando más se llena el local.
De lo que yo me pedí; la comida bastante rica al igual que, el café con leche. Pese a que dijeran que las salsas podían picar (odio el picante) me lleve la grata sorpresa de que no picaban en exceso y acentuaba el sabor de la comida, a la que le pongo un 9/10 dado que la calidad es muy buena pero el precio es un poco desorbitado.
El local se lleva la nota de 7/10 pero el trato por parte de Yuri se queda en un 10/10. (Amabilidad, cercanía y super atenta).
Resumen: Local pequeño, con terraza externa, de buen ambiente, con carta escasa pero con elaboraciones muy ricas, con precios levemente costosos de calidad media-alta, con una atención excepcional.
Servicio y amabilidad excelente.
Ambiente cubano excelente.
Local, parece un poco antiguo, pero no desagradable.
Comida, increíblemente deliciosa y abundante.
Totalmente recomendable.
El personal es súper atento, y son bastante rápidos. Al llegar te hacen fotografiar la carta. Comimos ropa vieja que no especifiqué que quería con arroz congri en vez de blanco y no tuvieron problema en cambiármelo (venía con plátano frito) y carne de cerdo en taquitos que muy tierna. La ropa vieja tenía trocitos de verduras y una salsa rica. Muy recomendables ambos platos, y la cantidad en su medida para que también cupiera el postre. De postre pedimos el pastel de boniato que viene regado con sirope de chocolate, es jugoso y parece como si estuvieras comiendo pastel de chocolate pero no tan empalagoso, vino con una bolita de helado de vainilla y es uno de los postres más rico que he probado en años. De beber tomamos daiquiri de mango que no me resultó muy rico porque tenía mucho hielo y venía en una copa relativamente pequeña y mojito que sí estaba muy bueno. El camarero que nos atendió tuvo la amabilidad de mostrarme la gran cantidad de postres que tenían.
En resumidas cuentas un buen restaurante cubano al que ir de vez en cuando. Acogedor y buena comida.
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