Le Petit Handicap 6

Es nuestro sitio de confianza 100% Ir allí es sentirse como en casa desde que entras hasta que sales. Comida de 10! Cada plato nuevo que pides te sorprende, y cada vez que vas está aún más rico ¿Como puede ser? B-R-U-T-A-L ( Quien vaya pedir tacos SI o SI ) Todo está muy cuidado y tienen muchos detalles, desde la musica hasta la decoración del local. Es bueno para cualquier ocasión de verdad!!!! Nosotros seguiremos yendo si o si!!!! Y recomendándolo por supuesto!

La comida está exquisita, probamos la sardina ahumada con tosta y guacamole que estaba sublime, el salmón también delicioso con unas verduras muy ricas, la hamburguesa de toda la vida que tenia un sabor a parrilla riquísimo aunque el bacon no estaba tostado y la carne no sabía muy fresca, venia con unas patatas naturales muy muy buenas. El cheese cake estaba buenísimo y lo mejor de todo fue el brownie con helado demasiado espectacular, el mejor que he comido en España, ese helado no se de que era pero se combina perfecto con ese brownie caliente y excelentemente bien hecho. Hasta el café estaba fantástico, muchas gracias, tuvimos un servicio muy bueno y el lugar es muy agradable también. Volveremos seguido.

Fuimos hace unos días a cenar por recomendación de un buen amigo. El local es acogedor, no muy grande pero lo necesario para sentirse cómodo. Pedimos unas cervezas de grifo ( La Salve de Mahou) y una ensaladilla ( riquísima). De entrantes nos recomendaron el tartar de salmón ( todo un espectáculo) unos nachos que se comían solos y unas patatas bravas de verdad, no lo que pretenden vender en otros lugares como "patatas bravas". Como plato principal, pedimos unas mini hamburguesas, la carne es de muy buena calidad y la combinación de sabores desde mi punto de vista es perfecta. Para postre una tarta de queso espectacular y un brownie caliente con helado ( la combinación perfecta) todo casero y con el dulzor justo para no empalagar. Se nota que son profesionales, la mano en la cocina se demuestra con la calidad de cada elaboración y el buen producto utilizado. Precio más que justo para lo bien que cenamos. Un lugar con mucho encanto en donde los dueños te hacen sentir cómodo con su calidad humana. Me dedico al mundo de la hostelería desde hace más de 20 años y tener un local cerca de casa tan bueno es de agradecer. Espero que sigáis así y poder disfrutar tanto por muchos años.

Me ha encantado! Salimos sin plan, buscando algún sitio nuevo para cenar. Pasamos por fuera y me llamó la atención el olor a incienso. Volvimos para saber si podíamos cenar y sin problemas nos acomodaron en una mesa en la terraza techada. Tiene una carta muy variada y un trato estupendo. Ahora al salir los platos ya me acabaron de conquistar. Todo lo que probé estaba buenísimo, hasta los pinchos, con una carne blandita. La presentación de los platos ni que decir. Solamente que volveré pronto a probar más cosas. La única que pena fue no llevar más monedas para la propina ( siempre pagamos con tarjeta) pero os la debo. Para repetir y repetir y por supuesto recomendar. Un diez!!