De Gustibus

Lugar precioso y rico de amor rico en comida y con los mejor chef en cocina y al horno ,con platos y pizza de un nivel espetacular , lugar romantico y ambiente tranquilo , el servicio de camareros es lo maximo nivel que se puede desear.Comida italiana top level.Bastante sitios por aparcar.Consejo a todos de probar este lugar.

Un restaurante verdaderamente italiano. Ya solo cuando entras y ves a familias italianas cenando, te Dan buenas vibraciones. La pasta, las pizzas, está todo riquísimo, déjate aconsejar. Sólo le falta poner los precios de Nápoles. Pero un lugar al que acudir siempre que apetezca italiano y buena pasta.

Ayer fuimos mi pareja y yo a cenar y aunque cuando habíamos ido en otras ocasiones quedamos encantados con la comida ayer pedimos una carbonara la cual se quedó pasada cuajándose el huevo y sin sabor a carbonara, la pizza Giuseppe si que se estaba buena. La atención del camarero fue espectacular, en todo momento fue muy amable y atento sobre la tardanza de la comida y sobre cómo queríamos que saliesen las comandas; su nombre es Julián y estamos muy agradecidos por el trato que nos brindó ayer. Cabe destacar que hubo un momento en el que una compañera delante de nosotros le llamó la atención por inconvenientes en los tiempos de cocina, lo cual es de muy mal gusto hacer delante de un cliente.

Ayer fuimos a cenar pedimos estas 3 cosas, que fueron la burrata Pugliese al tartufo, la pasta al pesto y spaguetti Aglio olio e peperoncino y Trofie Al pesto y estaban bastante bueno. Luego pedimos de postre una creps y esta muy rico, en resumen buen lugar para cenar ambiente tranquilo, algo Carillo por esas 4 cosas pagamos 69€ pero es lo que suele pagar normalmente. Lo que si los postres están 8€ y creo q es una pasada, no se como serán de tamaño los otros postres, pero para una sola Creps 8€ me parece muchísimo. Pero en resumen si buscas un lugar tranquilo y comida rica este es sin duda un buen lugar, ademas te ofrecen chupitos y piruletas 😊 !!!

Restaurante napolitano que en mi opinión tiene los precios bastante inflados, aunque lerecidos en función del plato. En el caso del antipasti y ensaladas son innecesariamente caras. Respecto a las pizzas la 4quesos se podría haber llamado 2quesos ya que brillaba por su ausencia el parmesano y el gorgonzola. Vamos, un pan con queso que podrían haberse derretido en el microondas y saber mejor. En positivo, la doabila me sorprendió ya que han modificado la receta y esta vez se notaba picante de verdad, además de traer aceite con guindillas que SÍ picaban (no como antes).

Vine por una sorpresa de cumpleaños, excelente elección. Es un restaurante italiano con bonita decoración. El dueño, Francesco, italiano, algunos camareros también y por supuesto el cocinero, Masimo, eso ya inspira confianza de primeras. Cerveza Moretti, típica italiana como no, de entrada tienen diferentes antipasta, seleccionamos una de las burratas, muy rica. De pasta tienen muchas variedades, recomiendo la pasta con pera, le da una mezcla jugosa entre lo dulce y lo salado. La pizza, especialidad de la casa, increíble, la pasta es de las que no dejas ni un resto. También en los postres no fallan y fuimos con una tarta de queso de elaboración casera, muy tierna y sabrosa. Destacar la gran atención de todo el equipo, hasta Masimo el cocinero nos preguntó qué tal había ido la cena. Si buscas un italiano auténtico, no lo dudes, nosotros sin duda repetiremos.

Una terraza fantástica, un servicio impecable, y una comida maravillosa. Comimos antipasto (mozarella, berenjena, tomate seco, aceitunas y unos deliciosos mini pimientos rojos, picantes, rellenos de atún), focaccia blanca con aceite de oliva y orégano y luego todos pedimos un plato de pasta, seca y fresca. Mis compañeras de mesa pidieron espaghetti carbonara y trofie al pesto ligure; yo pedí tagliatelle de pasta fresca con porcini e salsiccia (boletus edulis, salchicha fresca y tomate, una maravilla de salsa), pero no tenían tagliatelle y me sirvieron ese mismo plato pero con la pasta en 'formato' trofie. La pasta fresca, fabulosa. Nos ha encantado. No es el italiano más barato, pero no es tampoco caro. Merece mucho la pena. Volveremos.