Luna Rossa Ristorante Pizzeria

Restaurante y pizzería, con una carta sugerente, que destaca por la calidad de la materia prima y una factura de calidad. En particular, la masa de la pizza me pareció más resuelta que en otros locales equiparables. El local es pequeño, por lo que conviene reservar; e, incluso algo incómodo y poco original. Aunque no hay cocina a la vista, se puede observar la preparación a traves de una ventana. Horno de leña tradicional. Tomamos la ensalada Luna Rossa, vistosa y sabrosa , que llevaba bacalao, aceitunas y mezclum de lechugas y dos pizzas para compartir -la Calabrese y la Graciosa- que se salen ambas de lo tradicional, la primera con una especie de sobrasada y, la segunda con jamón de parma, burrata y scamorza ahumada entre otros ingredientes. Genial El postre no estuvo al nivel: un café normal y Cannoli siciliani con requesón "reforzado con un queso más curado" pero sin fruta escarchada, según los cánones. Servicio atento y ágil. Con todo, muy recomendable.

Hicimos una reserva por teléfono en la cual nos indicaron que teníamos una hora y media para comer lo cual nos pareció bien, pero creo que es responsabilidad del restaurante que el servicio sea rápido para tener tiempo suficiente, ya que llegamos los primeros al restaurante y nos sirvió el plato principal mucho después que al resto que había llegado mas tarde, estábamos comiendo el postre y nos avisan de que tenemos que abandonar el local, ni café pudimos tomar. Destacar la atención de Carlos que fue fantástica y la comida era deliciosa y abundante.

Muy buen sitio para comer comida italiana. Nosotros nos pedimos un plato de pasta que estaba bueno pero lo que nos encantó fue la pizza que nos pedimos. El conjunto de los ingredientes, que se notaba que eran de calidad, y la masa, que era muy tierna y nada pesada, han hecho que queramos repetir en este sitio. Además el personal muy agradable y con un servicio bastante rápido.

La comida está rica pero mejorable. Pienso que a mi pasta le pusieron poco jamón osea literal 3 mini lonchitas. La pizza estaba de muerte esto si lo recomiendo con los ojos cerrados y el carpaccio. Y el tiramisù no me gusto estaba muy seco. Pero bueno, no es fácil encontrar un restaurante italiano perfecto en Madrid. Empiezan muy bien pero con el tiempo suelen decaer.

Excelente restaurante italiano, bien situado, con una atención exquisita y sobretodo... Lo que pide uno cuándo va a comer, unos platos exquisitos. El entrante del día eran salmonetes con tomates del Vesubio y una especie de pimientos italianos... Increíbles!! La pizza era la capriziosa y también espectacular. Los tallarines con langosta y 'nduja muy sabrosos aunque diré que de lo probado, fue lo que menos nos ha sorprendido. De postre tomamos tarta de ricotta y pera que también estaba buenísima y muy cremosa. Hemos acompañado con pan y vino blanco siciliano y hemos pagado 89€ (muy bien invertidos). Por poner un pequeño pero, las mesas están demasiado juntas en algunos casos y eso resta un poco de intimidad.