Las críticas que había leído, especialmente en TripAdvisor, eran cuanto menos desalentadoras para ir a cenar aquí. Sin embargo, gente de la que me fío me había dicho que las vistas eran inmejorables y la comida era bastante buena. Las quejas generalizadas eran contra el servicio, la comida y su precio. Pues bueno, por partes: el servicio nos pareció profesional y atento, absolutamente pendiente de todas nuestras demandas. La comida nos gustó, especialmente los segundo; un rape a la brasa con reducción de salsa de suquet y un arroz de bogavante, en su punto, con el bogavante sin pasarse y en cantidad, nos encantó. Los primeros también estaban ricos pero aquí su precio si que era excesivo; un tartar de atún mínimo y a 18 euros y unas deliciosas croquetas de gamba roja, pero a 4,50€ la unidad. De postre, una torrija de coco extraordinaria. Así que en resumen; creo que las pésimas críticas no están acorde a la realidad del restaurante, que pese a ser un restaurante de hotel ofrece una cocina rica. Además, las vistas son inmejorables, pegado a la orilla del mar. Un sitio privilegiado donde podrás disfrutar de una cena romántica, aunque eso sí, a un precio algo elevado. ✅Puntos fuertes: la comida que pedimos estaba buena, su ubicación es inmejorable. ⭕️Puntos débiles: carta excesivamente corta y precios elevados. 💵Precio: 50-60€/pax. 💻 Esta y otras reseñas las encontrarás en nuestro Instagram, @madridbocados. Con las mejores fotos y más detalladas críticas. Hasta el próximo bocado.

Restaurante marítimo con una terraza con vistas espectaculares