Nos ha gustado mucho, las raciones del menú son muy abundantes, de calidad y muy ricas! producto locales y platos típicos con buen ambiente y servicio.
Me aconsejaron este restaurante en Ágora donde estaba alojado.
Un excelente menú de 16€, con botella de sidra incluida.
De primero ensalada con verduras asadas y pollo frito, de segundo, entrecot de ternera y de postre torrija de la abuela. Todo exquisito y muy bien presentado.
La atención de su personal atenta y amable.
Pocos sitios quedan como este. Comida espectacular a precio popular. El trato es familiar, cercano y sin pijadas. Acabé aquí por casualidad y salí agradecida de haber conocido este sitio. Para volver sin duda una y otra vez. Mi elección del menú fue la tortilla de bacalao y el entrecot y fue un 10. Gracias a cocina y al encargado de sala por todo.
No dejes de subir al baño por ver esas pegatas que hacer el lugar aún más auténtico 💪🏼.
Todo muy bien, llegamos a las 15:00 a punto de cerrar la cocina y nos atendieron sin ningún problema y muy buen trato por parte del camarero. La comida riquísima, comimos de menú y muy recomendado. Los postres espectaculares, en especial la torrija y la tarta de queso!!
Buen servicio y comida increíble. Menú del dia 16€ para chuparse los dedos.
Un sitio muy acogedor, música perfecta, ambiente agradable. El servicio alucinante, amable y eficiente. La comida una pasada. Sabrosa, cuidada y de la zona. Una joya escondida que nadie se debe perder si está en la zona. Y no os olvidéis de los postres porque están para matarse.
Buena experiencia del menú del día de 15 euros. Comida casera y típica de Estella. Lo único malo es que estaba la música muy alta. Ajo arriero y calvotes muy buenos. Bastante recomendable y frecuentado, reservar en finde.
Pese a tener menú, decidimos coger de carta. Pedimos una tortilla de bacalao, dos croquetas de jamón, pimientos de piquillo y navajas a la brasa. Nos pusieron pan y nos lo terminamos, pedimos más y como se ve en la cuenta no nos lo cobraron aparte. Nos gustó mucho la comida, era casera y tenía mucho sabor y rico. Las croquetas se deshacían en la boca. El aceitillo de los pimientos lo terminamos untando pan. El local es amplio y agradable. La camarera que nos atendió muy amable. Sitio muy recomendable si estás de visita por la ciudad. También tenía mesas fuera y había grupos con perros.
Comida de menú muy buena, especialmente la tortilla de bacalao y la carrillera. Tiene terraza, perfecta para perro
Abundante y buen menú del peregrino.
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