Chocolateria Valor

Un trato muy amigable y con prestancia. Precios módicos y calidad bastante alta en cuanto a los productos y eso es mucho a valorar porque hay que tener en cuenta que hablamos de todo tipo de chocolates, enorme variedad de combinaciones con estos diferentes combinados.Además ofrecen también unos churros cuya masa hacen y manufacturan ellos en la cocina del establecimiento y se manufactura al momento y sobre todo,,lo frien ellos casi para cada cliente que los pide.no fríen una rueda grande como en churrerías matinales y los que sobran,,se quedarían ahí esperando a que otro cliente quisiera pedir churros,esta gente amasa pequeñas cantidades de masa y luego,en relación a la cantidad de churros que pide un cliente,,esa es la cantidad que fríen,,digo en relación a lo que pide el cliente porque todos sabemos lo que provoca el olor de churros friéndose cuando se está consumiendo tazas de chocolate caliente o cafes al gusto,, rápido aparecen otros clientes con ganas de churros y por eso, cuando un cliente los pide y pide una ración, que creo son cuatro,pues fríen dos raciones porque en el tiempo que he estado,he comprobado que siempre ocurre. Cuando están acabando de freir ese pedido,ya hay gente levantando la mano para pedir churros,es un acierto porque es verdad que tienen pastas artesanales muy buenas y que tienen dulces caseros de pastelerías de pueblo,los tres o cuatro pueblos que hay alrededor de Cáceres y que desde antaño tienen muy buenos pasteles con mucha tradición de manufactura del norte de África porque esta zona siempre fue uno de los escasos lugares de la península que por estar muy cerca de la frontera con Portugal,,dio facilidad a que pudieran permanecer escondidos a plena vista entre el gentío,, algunas familias musulmanas y con la característica de que la mayoría se camuflaron haciendo repostería y el resto hortelanos. Aquellas mujeres musulmanas que hacían dulces para sufragar en cierta forma la economía familiar por quedar sin nada de la noche a la mañana y sin que los hombres pudieran ejercer ni sus trabajos,ni cualquier otro trabajo que les pudiera ofrecer algún vecino,se suponía que no quedó nadie en la península y por tanto,,ellos tuvieron que sobrevivir durante un par de generaciones sin constar en ningun sitio pero,,al menos para los que vivimos hoy,nos quedó el buen hacer de aquellas madres musulmanas que eran capaces de obtener milagros con cuatro ingredientes simples. Este establecimiento se sirve de la repostería de estos pueblos y es cierto que es de gran calidad pero,,ese olor que produce el freir de los churros sigue teniendo un poder inimaginable. Creo que para las personas que les guste salir a media tarde y tomar café o alguna infusión o deleitarse con diferentes y singulares chocolates para comer y sobre todo beber,este lugar es de lo mejor que puede haber en muchos kms alrededor

Le doy 5 estrellas ante todo porque era domingo las 8 menos cuarto de la mañana necesitaba una cafetería y era la única que encontré abierta por lo que es de estar agradecido. En cuanto a decoración es preciosa, tienen churros con chocolate de la marca valor y también venden bombones de la marca. El trato fue adecuado, aunque se les olvidó ponernos los churros y se lo pusieron antes a otra mesa, es un error humano que no tengo en cuenta. El sabor del desayuno estaba muy rico, en especial los churros. Reseñable que el precio es elevado, nos costó casi 8 euros dos personas, cuando normalmente nos sale 5...pero como todo, pagas la marca. Lo recomiendo.