Tanto la experiencia hamburguesera como el trato al cliente son de sobresaliente 🔥🔥🔥 La combinación de carne + queso de cabra + morcilla + cebolla caramelizada (la hamburguesa Black Label) es espectacular y nos dejó tremendamente satisfechas 🍔 ¡Hasta las patatas de acompañamiento estaban riquísimas! ¡Enhorabuena, chicos! ¡Vuestro local es para repetir! 🤩

Aprovechando la novedad de las hamburguesas, fuimos a probarlas y la verdad es que no decepcionaron. Estaban muy, muy sabrosas y, a la toma de comanda, atendieron muy bien al punto de la carne, lo cual hizo que la experiencia fuera buena. De entrantes pedimos una patatas rancheras con pulled pork (no recuerdo el nombre exacto del plato) y realmente estaban muy ricas; suelo fijarme mucho en la textura y sabor de las patatas cuando las tomo fuera de casa y éstas estaban crujientes y sabrosas. También pedimos una croquetas de rabo de toro, cuya composición y sabor, bueno, aceptables. Pongo 4 estrellas porque creo que podrían mejorar algunos aspectos de la comanda: -El pan brioche de las hamburguesas, sí, muy rico, pero se empapa con rapidez y hace que la hamburguesa se haga, nunca mejor dicho, bola. Como consumidor, propondría elegir tipos de panes para la hamburguesa: pan clásico, de cristal, trufado, mollete, rústico... -Las patatas rancheras, quizás le aplicaría un poco más de pulled pork, que es el ingrediente estrella del plato, y un mix de queso fundido por encima, antes que el cheddar en chorrillo. -Las croquetas de rabo de toro, sí, sabían a rabo de toro pero la composición era desproporcional a favor de la bechamel. Propondría un poquito más de rabo de toro en la masa, que se note la textura de la carne cuando le das el primer bocado. El servicio de Noel fue impecable; atento, cercano y don de gentes, sin duda. Sin duda, volveremos para ampliar la experiencia en el restaurante, probar otra variedad de hamburguesas y continuar con la tradición de pizzas.