Tu Impacto
Reseñas Recientes
Fue una experiencia extraordinaria. Al entrar al restaurante, se siente un ambiente cálido, la música en inglés mayormente clásicos de los 90’s y alguna otra de vaselina. Es interesante la decoración con objetos viejos y un display de gran variedad de vinos. No pedimos el menú de degustación , ya que yo no como carne, pollo, huevo y algunas otras cosas. Ordené lo que me recomendaron no tenia nada de lo que no comía. Es un lugar para pedir mínimo 5 cosas cada quien. Continuó con mi primer bocado. Fue como una flor de betabel con anguila y caviar. Una explosión de sabores en mi boca. Algo tan sencillo que sonaba y tan complicado a la vez por la cantidad de sabores que explotaban en mi boca que llegue a derramar una lagrima de felicidad. En mi vida había probado algo parecido y de ahí en adelante todos los platos fueron igual de excelentes. El servicio a cliente fue fenomenal. Todos los que nos atendieron fueron muy amigables y Sonia ayudó a mi hijo a escoger los mejores vinos para probar. Vaya que tiene mucho conocimiento del tema y te platica de ellos cómo si contara una historia. Podría continuar escribiendo de la experiencia que vivimos mi hijo y yo, pero necesitarían mucho tiempo para leer. El precio es alto, pero, VALE TODA LA PENA , LO VALE! Volveré cada vez que pueda.
Ein hervorragendes Restaurant mit ausgewählter Küche und sehr guten Weinen. Die Raffinesse der Küche ist, trotz der hohen Erwartungen an ein Restaurant mit Michelin Stern, hervorzuheben. Die Atmosphäre ist ungezwungen und sehr angenehm, der Service stets aufmerksam. Noch erwähnenswerter ist jedoch die Freundlichkeit des Personals und des Gastgebers Ivan gegenüber Kindern. Die Küche bereitet gern für Kinder etwas zu. So kann man auch mit Kindern ein solches Lokal genießen. Wir würden jederzeit wieder kommen wenn wir in Barcelona sind! (Traducido por Google) Un excelente restaurante con cocina selecta y muy buenos vinos. La sofisticación de la cocina es sobresaliente, a pesar de las altas expectativas de un restaurante con estrella Michelin. El ambiente es informal y muy agradable, y el servicio siempre atento. Pero aún más digno de mención es la amabilidad del personal y del anfitrión Ivan hacia los niños. La cocina estará encantada de preparar algo para los niños. También puedes disfrutar de un restaurante como este con niños. ¡Volveríamos en cualquier momento si estamos en Barcelona!
Cenamos en la terraza, donde en principio no se puede pedir el menú degustación, aún así nos propusieron hacer un menú con sus platos más característicos. Todos los platos nos parecieron espectaculares especialmente los snacks: el crujiente de jalapeño, la remolacha, el canapé de pollo y el mochi de sobrasada. El servicio fue perfecto.