Marmurio Do Rio

De principio a fin, es una experiencia gastronómica que tienes que disfrutar si te gusta el buen trato y ėste tipo de cocina. Una oda al buen gusto desde que entras por la puerta hasta que sales. Puedes disfrutar de dos menus degustación: corto o largo, con maridaje o sin maridaje. Elegimos el corto con maridaje. Coméntalo con Luis cuando te dé la bienvenida y disfruta de su gran equipo, todos remando en el mismo sentido : Sumiller, Chefs, Camarero (disculpadme, no soy capaz de acordarme de todos vuestros nombres). No sufras por las fotos, al ser una experiencia de temporada, cuando vayais, disfrutareis de platos distintos, ya que es una cocina viva, dependiendo de sus proveedores y de la temporada. Hacía falta una opción culinaria así en Allariz. Con ganas de volver y disfrutar del menú largo.

Es toda una experiencia, cada detalle muy cuidado, literalmente es arte lo la fusión qué hace Luis y su equipo. Todo es impecable, se me vienen muchas palabras pero definitivamente es sublime.

Experiencia gastronómica increíble. Marmurio do rio se encuentra en donde antiguamente se situaba “Casa Fandiño”. Han restaurado todo el edificio y verdaderamente quedó precioso. El comedor se encuentra en la primera planta del edificio. No hay carta, la propuesta consta de opción de dos menús, uno corto y otro mas largo (1 plato principal y un postre a mayores) Todo elaborado con producto de temporada y proximidad por lo que a menudo, cambiaran platos. La opción de maridaje merece la pena, la propuesta es a base de vinos naturales y de autor, también proponen cerveza para los aperitivos. El trato del personal es una maravilla. Y la relación calidad-precio inmejorable. Repetiremos seguro y auguramos muchos éxitos a este nuevo proyecto en Allariz.

Excepcional. Nunca he ido a ningún sitio con mejor calidad-precio. Hay dos menús. Nosotros elegimos el largo, de 62 euros. Primero te ponen un total de doce aperitivos distintos, divididos en cuatro secciones: tierra, agua, aire y fuego. Muy curioso e interesante. Hasta la tierra en que se presentaban sus tres aperitivos era comestible. Luego cuatro platos "principales", uno de "foie con mejillones", otro de mar y montaña con un conejo a la royal con langostinos que me impactó. Luego te ponen, para ir terminando la experiencia gastronómica, los callos (con un toque muy curioso de canela), quesos y dos postres. Los postres son sorprendentes y de "sobresaliente". El primero de ellos, nos explicó el chef, que era como la ostra al revés, en vez de echar limón a la ostra echábanos la ostra (en gelatina) al helado intenso de limón junto con semillas garrapiñadas y algo que no recuerdo. Cuando nos lo explicó, quedé un poco preocupado, y mi sorpresa fue que al mezclar los elementos era una auténtica maravilla. Otro era de remolacha. Y otra vez lo mismo, nos explicó que tenía bayas de fruta de la pasión y varios elementos más. El resultado nuevamente maravilloso. Volveremos en cuanto podamos. Y supongo que habrán cambiado ya el menú, porque nos dijeron que lo hacían casi a diario.. je je.

¡ Extraordinario! Hemos venido desde Madrid para degustar en el Marmurio, ya que llevamos años siguiendo la cocina de Luis Moreno. Estuvimos anoche y, desde que llegamos al restaurante y abrimos esa belleza puerta, todo fue increíble; la decoración manteniendo la armonía de Allariz, un pueblo precioso, detalles en cada rincón , el menaje cuidado acorde a cada plato, la música que te va acompañando y, por supuesto, cada exquisito plato. Hemos elegido el menú Marmurio y ha sido un acierto. Hemos disfrutado de todo ese conjunto, tan cuidado, que tenía un hilo conductor para que sintieras el arte de su gastronomía en cada bocado. Platos muy elaborados, con productos de la tierra y de la temporada. Decir, también, que el trato de cada profesional ha sido estupendo. Repetiremos!!