Excelente, tanto su comida (deliciosa y abundante) como su personal, muy atentos y profesionales. Es un local pequeño, conviene reservar. Volveremos sin duda!!!
Todo lo bueno que se pueda decir queda corto tras la amabilidad, el buen servicio, la calidad de los productos, la cantidad... hemos salido encantados. El mejor chuletón de Ávila. Gracias por hacernos pasar un buen rato en vuestro magnífico restaurante
Hemos comido hoy por recomendación del dueño de nuestro apartamento y ha sido un escándalo! La localización increíble, en el mismo centro de Ávila, la relación calidad-precio de la comida es espectacular, los entrantes, el chuletón....veíamos los platos de las otras mesas y decíamos no puede ser, habrán pedido otra cosa.....
El trato del dueño de 10! Han tratado a nuestros hijos como si fueran suyos.
Si vienes a Ávila, no lo dudes y visita los Candiles.
Todo un acierto!
Buen lugar para ir a comer en Ávila cerca de la catedral y la muralla. El comedor es pequeño ( habrá unas 10 mesas) , en la calle hay mesas pero en agosto solo es posible por la noche debido al sol y calor,con lo cual es bastante necesario de reservar si quieres ir a lo seguro. Tienen un menú por 38€ muy completo que puedes elegir un primero,un segundo,entra el pan ,una bebida y el postre. Lo veo barato para la cantidad de comida que ponen. Yo me pedí el milhojas de morcilla, un chuletón de Ávila que pesaría casi un kilo era tremendo y tarta de queso bastante buena. Luego tiene carta para más opciones. De los más valorados por internet,y la verdad que no está nada mal, muy bien todo.
Recomiendo venir si pasas por Ávila, el entrante de ibérico buenísimo y después el chuleton de Ávila puffffff y los.postres tarta de queso, tarta gredos, arroz con leche y helado de limón puffff de lujo, luego unos licores de invitación. Súper atentos, y de verdad el chuleton para repetir, recomiendo venir. El sitio es pequeño pero coqueto jejajjaja, enserio de lujo
FLORENTINO Alonso Bonilla
+5
Comimos muy bien, el vino que nos sacaron estupendo, todo riquísimo. El camarero ( un chaval joven ) nos atendió super bien. Después de los postres, nos ofrecieron , dos licores de hierbas y crema. Repetiremos seguro.
AMPARO MARTÍNEZ CATALÁ
+5
Nos encantó la comida y el trato. Si vas a Ávila no te lo puedes perder. La calidad es superior al precio, el menú de 38 euros es imposible de acabar, todo bueno y con cantidad.
Gran acierto. Variedad de meni donde puede elegir platos sueltos o bien menú.
Pedimos pimientos del piquillo rellenos (exquisitos), calamares y para terminar chuletón de avila. Muy bueno todo. De postre, brownie con helado de leche merengada. Al pedir la cuenta traen dos licores, gran detalle.
El servicio muy correcto en todo momento, el dueño pasa por las mesas al terminar el servicio para preguntar qué tal todo.
Hemos reservado y cenado en nuestra visita a Ávila, y la comida estaba riquísima, la sepia muy rica y el chuletón de Ávila exquisito, todo regado por un Rioja Coto mayor crianza muy rico y a muy buen precio, el postre helado estilo contesa normalito, parecía industrial, a los chupitos invito la casa. La atención de diez , paso el que parecía el dueño un par de veces a preguntarnos que tal todo, sin duda repetiremos si volvemos a Ávila.
Comimos muy bien, el chuletón de Ávila de 800 gramos estaba espectacular y el entrecot también estaba bueno. Puedes escoger un menú que incluye primer plato, segundo plato, bebida y postre a un buen precio. Cuando acabas te ponen unas botellas de orujo de hierbas y crema de orujo para que te sirvas por cortesía de la casa. La atención fue buena. Lo recomiendo si tienes intención de comerte un buen chuletón de Ávila.
Fuimos a comer a este restaurante, sin ninguna duda sitio top. El dueño y camarero son super amables y atentos, dando recomendaciones. Se tiene que reservar mesa, es difícil que esté vacío. Calidad de la comida excepcional y bien cocinada. Nos recomendó el menú 38€ un primero y un segundo a elegir de la carta, bebida y postres, que algunos son caseros. Plato estrella chuletón de casi 1 kg. Hay que pasar por esta casa, muy recomendable.
Fuimos un grupo de 6 amigos y salimos encantados de allí. El trato tanto de los camareros como del dueño del restaurante fue inmejorable, muy simpáticos y cercanos. Pedimos 3 entrantes: embutidos, tomates (muy sabrosos) y croquetas. De principal 2 chuletones para los 6 que estaban muy buenos. Quisimos probar también los postres y menos mal que lo hicimos, postres caseros de los mejor que hemos probado. Volveremos sin duda!
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