Nos encantó el lugar, la atención, el cuidado de sus platos, los sabores. Un lugar de parada fija en Zafra.
Nos atendieron a las mil maravillas, como en casa, cuidaban hasta el más mínimo detalle. Así da gusto ir a estos establecimientos.
Platos muy placenteros.
Si eres celíaco o intolerante al gluten, no puedes perdértelo. Toda la carta es sin gluten, incluyendo los postres. Comida tradicional con mucha clase. Las croquetas de chipirones y patatona originales y muy buenas, el solomillo y la pluma ibérica espectaculares. Volveremos
En nuestra visita a Zafra decidimos comer en este pequeño restaurante y la verdad que estuvimos muy a gusto. Ambiente agradable, muy buen servicio y buena comida en general. Carta visible desde fuera. Recomendable si estás por la zona.
Buen restaurante extremeño con ciertos toques de innovación.
Muy rico el carpaccio de picanha que tomamos de entrante. De principales, un plato de presa ibérica y otro de una trilogía de solomillo, secreto y presa en tres preparaciones distintas.
Los dos postres estuvieron a un nivel inferior al de los platos salados.
Correcta carta de vinos que estaría mejor con más referencias extremeñas.
Personal eficiente y amable. Recomendado.
Hemos tenido una cena muy agradable. Espacio bien diseñado, elegante. Los platos excelentes y el servicio 10.
Nos ha encantado. Hemos cenado jamón ibérico de bellota, ensalada de langostinos con mayonesa de almendras y solomillo de retinto con foie. El producto espectacular. El jamón 100% de bellota, la ensalada fresca y sabrosa y el solomillo se deshacía en la boca. De postre hemos tomado una tarta de dulce de leche con helado de yema tostada, que estaba fuera de carta y merece la pena. Destacar también la amabilidad del personal. Parada obligada en Zafra
Lugar muy acogedor en el que te sientes como en casa, magnífico trato desde que entras hasta que sales, y la calidad de la comida es impresionante. Para repetir sin duda
Francisco José Rico Sánchez
+5
Hay que ir. No de paso ni porque andes por Zafra, sino porque es un tesoro de sitio. Su cocina está muy por encima de su precio (aunque no es barato) hacen una ensalada de patata muy especial, muy recomendable el tartar, y aunque la carrillada o la presa con lascas de queso es espectacular, el plato estrella es el muslo de oca. Lo bordan. Ojo al aparcamiento si vas en coche, que en las calles del casco viejo hay poco sitio, aunque hay dos zonas amplias muy cerca. Resumiendo, es de esos sitios que le ponen mejor cara a la vida (y si le añades un buen vino, que los tienen…)
Se come super bien, sin duda repetiremos . Todo buenísimo y los camareros muy atentos y simpáticos . Nosotros tomamos :
_Ensalada de magret de pato
- Tabla de surtido de quesos
- Judías con perdiz
_ Helado de plátano y chocolate
- Croquetas de chocolate negro con salsa de chocolate blanco
Como no bebemos alcohol, lo acompañamos de refrescos y Nos invitaron a chupitos buenísimos sin alcohol y unas tejas de almendras muy ricas
Gracias
Maria Luisa Hernandez Valiente
+4
Hacía tiempo que no repetía en este restaurante , mis 4 estrellas son porque la carta no ha variado en casi nada y porque la carta de vinos es bastante normal.
La comida es de calidad y muy rica, pero mi consejo es seguir innovando y mejorando lo que tienen, que ya es bastante bueno, para ser aun mejores.
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