As Viñas

Me gusto todo, Raquel es la anfitriona y puedo asegurar, que todo lo hace desde el corazón, habitaciones decoradas con detalles, colchones y almohadas comodísimos, zona súper tranquila, para descansar y hacer muchísimas excursiones, desayuno muy completo con zumo de naranja natural, incluso las mermeladas las hace Raquel, de calabaza y naranja, la de tomate o mi preferencia la de manzana. Raquel te aseguro que volveremos 😘

Fuimos para el Resurrection Fest allí en Viveiro, y la estancia en este lugar y sobretodo la atención de Raquel hizo la experiencia inmejorable. Desde el minuto uno hasta el último estuvo muy atenta, siempre pendiente de que no pasaramos hambre, de que tuviéramos transporte hasta el centro... hasta en una ocasión ella misma nos acercó, Raquel te hace sentir como en casa, desde luego como una madre para nosotros. Unos desayunos riquísimos, recomiendo mucho las tostadas con las mermeladas caseras, sobretodo la de manzana. Las habitaciones muy cómodas y estancias muy limpias. Un lugar en el que desconectas y en el que sin duda te hacen sentir muy a gusto.

Restaurante situado en una zona rural al lado de la carretera, tiene un buen sitio de aparcamiento, es un establecimiento bastante grande y con una decoración rústica. La relación de los camareros con los clientes es de amabilidad y de mucha atención para que no te falte de nada. Entorno a la comida pedí una ración de costillas con dos chorizos y no conseguí comer el plato entero y eso que soy de comer mucho, las costillas estaban muy buenas y en su punto, mi amigo se pidió un chuletón y le trajeron un plato como un volante y mi otro amigo un plato de gambas de las cuales no escatimaron en cantidad. Para todo lo que bebimos y comimos el precio estuvo bien. La sensación de salir a la calle bien comido y respirar el aire del campo es algo que no se puede describir. Recomiendo que lo prueben.