Fuimos sin reserva porque pensábamos que en un pueblo tan pequeño, no habría problemas para comer... Pues casualidad, les quedaba una mesa para dos pero el resto estaba lleno.
Es un restaurante pequeño pero decorado de manera sobria y con música bajita de jazz, que hace amena la comida.
Nos atendieron de forma muy amable desde que llegamos.
Pedimos 2 menús del dia. Yo pedí caparrones (muy buenos, en su punto de cocción y mucho sabor), carrilleras al vino tinto (me lo recomendó el chico y muy ricas, la carne se deshacía en la boca) y de postre una tarta de queso fria.
Pude probar las albondigas con fondo de setas y la salsa estaba muy buena también.
Repetiría para probar más cosas.
Situado en el centro del pueblo junto al ayuntamiento resulta un lugar agradable pasa o bien tomar un almuerzo o comer.
El ambiente es agradable y muy tranquilo y la comida es muy buena.
Dispone de una terraza para poder tomar el café fuera y un amplio comedor.
Nos han llevado unos amigos a comer y todo riquísimo.
Las patatas a la riojana, espectaculares!
El churrasco, riquísimo y el lomo con champiñones totalmente recomendable; se te deshacía en la boca.
Probamos diferentes postres y todos riquísimos. En especial las natillas caseras y la contesta decorada con Nutella.
Todo un acierto.
Restaurante con muy buenos productos, especialmente porque son todos de la zona, cenamos Lecherillas que estaban espectaculares, nunca las he probado tan buenas, bacalao a la riojana y cocochas también muy muy buenas. El dueño muy atento y el servicio exquisito. Fuimos un poco a ciegas ya que no somos de la zona, fuimos a pasar el fin de semana a la Rioja y la verdad que fue una grata sorpresa. Si volvemos a la Rioja no dudaremos en volver a cenar o comer en El Refugio. 100% recomendable.
Muy recomendable, las comidas muy buenas.
Estuvimos cuatro dias, y quedamos muy contentos del trato que nos dieron sobretodo Jose que nos trato de maravilla tanto en las comidas como en los consejos que nos dio sobre las visitas que teniamos que hacer.
Muy buen sitio y no especialmente caro para tomar unas raciones como en nuestro caso, una cena con platos bastante grandes y muy buenos.
Era temprano y ya pude degustar un pincho de tortilla y un bocata de revuelto de gulas, todo exquisito. Atienden bien y el precio adecuado
Sorprendente este restaurante familiar en un pueblo que no llega a 400 habitantes. Disfrutamos de su menú diario donde sorprende la oferta para escoger, la elaboración y sabor de sus platos, el atento y cordial servicio de sala y por último, sorprende su magnífica relación Calidad/Precio. Por 15€, unos corazones de Alchachofas con Jamón, un Guiso de Cordero, una Tarta de Queso y una botella de un muy correcto vino del año DOC Rioja.
Sin duda, restaurante familiar de comida casera para volver muchas veces y recomendar... ¡siempre!
Comida rica, buena calidad/precio, El local nada especial, aunque limpio y bien acondicionado. Está en la plaza del pueblo, el pueblo tiene buenas vista. Comimos un pisto y una ensalada de tomate y de segundo una merluza y una carrilleras fantásticas
Hemos estado aquí hoy unos amigos después de hacer montaña y se ha unido otro que ha venido en moto. Hemos comido muy bien, probando varios platos distintos, todos exquisitos, cocinados con gusto y esmero. La atención excelente. ¿Qué más se puede pedir? Muy recomendable, volveré pronto. Enhorabuena!
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