Magnífico cocido. Cocina casera. El local es pequeño. Recomendable.
No se puede, siendo digno, decir nada (absolutamente nada) negativo, de este local. La experiencia, afortunadamente compartida con muy buena compañía, ha sido, emulando a Iglesias: Religiosa.
Los lunes: Cocido. Uno no puede imaginar siquiera que fuera de Madrid se elaboren cocidos de esta magnitud. Una maravilla para los sentidos. Y si a eso le añadimos la compañía y la magnífica atención de los dueños, eleva el sentido a otros lugares.
Hemos disfrutado desde la primera cucharada, aunque ya a la vista se mostraba más que placentero.
Nunca, aunque estéis llenos, dejéis de probar los postres caseros que elabora el esposo de Esther. Son mágicos.
Las atenciones, sin parangón. Muchas gracias, amigos.
¿Por qué Google no da la oportunidad de poner más estrellas? Porque sin lugar a ninguna duda, este Bar Restaurante La Luna, se las merece.
Ya estamos pensando en la siguiente.
Espectacular el cocido, para repetir seguro. El trato del personal fue muy atento y agradable, de esos sitios que hay que conocer. Hablando con el dueño se nota que lleva toda la vida en el negocio y le gusta lo que hace. La cocinera un 10, ¡volveremos a probar más platos!
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