Nos gustó este local ubicado en una calle tranquila. Cenamos en la terraza. El servicio fue algo lento, pero amable. La comida nos pareció original y muy sabrosa. Pedimos ensaladilla (un 10), carpaccio de gambas con burrata ( me encantó pero es muy muy pequeño), berenjena con algo japonés ( lo que menos triunfó) y croquetas de rabo de toro ( perfectas). De postre la sopa de chocolate con helado de naranja, sorprendente. Precio 18 por persona. Recomendable
Hace mucho tiempo que queríamos ir, la terracita con lucecitas para verano tiene mucho encanto y es una calle tranquila tanto de gente como de coches. Nos ha encantado, la comida y el servicio, la chica que nos atendió fue muy agradable y cercana. Pedimos la ensaladilla con pollo y trufa, muy rica, las croquetas que la de rabo tiene muy buen sabor y no sabe a fritanga, los tacos deliciosos, bien de tamaño y bastante rellenos, la masa muy bien hecha, magret de pato con naranja por encima que lo hace muy original y entraña con pimientos de padrón muy tierna, de postre nos dejamos recomendar por su favorito que eran natillas de azafrán con una base de galleta y nos encantaron mucho! Todos los platos son muy originales y curiosos y volveremos pronto para seguir probando, también destacar el tinto de verano que lo hacen muy bueno. De precio medio unos 25€/30€ por persona. Lo recomiendo y volveremos pronto.
Buenísimos platos y buen trato. La cantidad sí que es justa, pero es lo que tienen los gastrobares, que vas a experimentar sabores y no a llenarte. Aunque con 5 tapas y un postre nos quedamos muy bien siendo dos personas.
Nos trataron muy bien, pues se les olvidó anotar una tapa y a cambio nos invitaron a dos cervezas.
El postre llamado “sopa de chocolate” es sorprendente, lleva una bola de helado de naranja con un sabor muy natural.
Platos originales, servicio y trato estupendo.
Carta muy ajustada para un restaurante. Lo que hemos pedido esta bueno, pero no es para tirar cohetes. He probado mejores platos más económicos, debido a que me van a contestar que son de primera calidad, diré que los otros platos a precios mejores, también utilizan productos de primera calidad.
Y ahora más que nunca hay mucha competencia, con respecto a la restauración, cada vez hay más restaurantes que ofrecen mucha calidad, con platos exquisitos, a precios muy buenos.
Respecto a la atención, he de decir, que siempre que nos quitan un plato, siempre nos preguntan si hemos acabado, más cuando algo queda en el plato, pero esta vez no fue así. Y si, la atención fue correcta, pero deberían de sonreír más al publico, ganarían mas puntos y encima es GRATIS! .Sonreír esta poco valorado hoy en día en la restauración.
El ambiente dentro del local es muy bueno, y la terraza es muy agradable también. Es un sitio acogedor.
Local muy acogedor al igual que el servicio, los platos muy elaborados y muy ricos, al igual que los postres.
Buena calidad/ precio, para repetir
Excelente y muy diferente, por eso merece la pena salir a cenar!
Una gozada de restaurante. Mucha creatividad gastronómica y un impecable servicio. Totalmente recomendable. Volveremos para seguir probando más platos de su carta.
Buen gastrobar en Benimaclet, completamente diferente a lo que se oferta hoy en día en la zona. Se nota calidad en el producto que utilizan y en la elaboración de los platos.
No veníamos desde hace más de un año, sigue todo igual de bueno.
Nuestras preferidos son la ensaladilla con trufa, patatas con alioli, croquetas de rabo de toro, tallarines de sepia y el plátano con dulce de leche para postre.
Muy recomendable
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