La camarera simpática, atenta y muy àgil. La comida muy buena y porfin unas bravas con salsa brava. Una terraza con grandes vistas y un servicio estupendo. Un sitio encantador.
Buena comida casera, precio muy ajustado. Servicio eficiente y muy agradable. Preparan mesas para grupos numerosos. Dispone de terraza con bonitas vistas de Vacarisses y la montaña de Montserrat. Abierto hasta las doce la noche.
A resaltar el surtido de brochetas. Y si ese día hacen callos a la madrileña pidetelos, Picantones, melosos y mucha gelatina, buenísimos. Los pies de cerdo a la brasa espectaculares
Tienen menú diario compuesto de tres primeros y y tres segundos y postres a un precio insuperable.
El problema es que tiene una clientela que a veces resulta bastante incivica que se cree que por pagar un menú tiene derecho a chillar, gritar y dar la comida al resto de comensales.
El menú muy bien...
Buen trato...
Lugar acogedor...
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