Noelia Navarro Tordera
+5
Estupendo lugar, acogedor y muy bien decorado. Menú de medio día variado y a muy buen precio (12€). Platos deliciosos y originales, servicio muy atento, rápido y amable. Lo recomiendo 100%. Volveremos!
Un restaurante que no te deja indiferente. Siempre me sorprende cada vez que voy y esta vez no fue menos...
Los nuevos platos tenian pintaza, la mayor parte de los alimentos sin gluten y para los que no somos de carne tambien hay opciones riquísimas, cuidando los detalles y con ello a las personas.
Y con la decoración como con la carta, innovando cada temporada.
Hemos ido por recomendación y la verdad que no ha fallado, local bonito, recogido y con buena decoración, un buen ambiente y muy tranquilo. La propuesta culinaria es un acierto, tanto por la calidad como por la presencia de los platos o su cantidad. Nos tomó nota el gerente, muy correcto y con buenos consejos, luego siguió una de las camareras que pecó con un poco de timidez o falta de ritmo, pero no hay que achacarle nada malo ya que estos días los tenemos todos. Lo dicho, un buen restaurante algo escondido pero de los que se agradece encontrar.
Sin duda lo que más nos gustó fue la cocina: los sabores y las texturas de los platos, una pasada. Realmente disfrutamos de la cena. La presentación y el servicio de 10.
La sangría de cava super recomendada.
Hemos ido a comer mi marido y yo por recomendación de unos amigos y ha resultado ser un acierto. El restaurante tiene un ambiente acogedor y el servicio es bueno. En cuanto a la comida, destacaria torrezno bravo con alioli de ajo negro (un plato diferente y muy sabroso) el costilla de cerdo oriental a baja temperatura (se deshacía solo y tenía un glaseado muy rico) y la torrija de brioche caramelizada, que es hasta la fecha la mejor que hemos probado, así que todo de 10 . Nos queda pendiente probar muchos entrantes de la carta, así que repetiremos. El precio es razonable para la calidad y cantidad de los platos. Es un lugar que recomendamos.
La atención del mesero muy cercana dándonos consejos en todo momento y una decoración sutil y música agradable hicieron una experiencia inigualable donde todo estaba espectacular.
El precio bastante razonable para la calidad y elaboración que aportaban los platos, con 30,10€ por comensal.
Destacaría tanto la croqueta liquida, presentada en simples capas en las que cada cucharada era espectacular, y por la otra parte el bocadito de patata sufle que cuando la tenías en la boca y la mordías se juntaban todos y era una explosión de sabor, también hay que decir que después de estos dos entrantes los buñuelos no fueron nada espectacular y los canelones estaban buenos pero nada parecido a los dos entrantes antes mencionado. Si vais tenis que probarlos !!
Fue buena la experiencia. La comida buena y original. A pesar de ser 5 mesas, el servicio fue un pco lento. Calidad precio aceptable. Fue una suerte encontrar es restaurante por casualidad
Sitio muy recomendable, buena atención, producto bien elaborado y presentación de los platos que llama la atención.
Destacar el steak tartar, la ensaladilla cítrica, el tiramisú y la torrija.
Sin duda, vale la pena volver más de una vez a probar toda su carta, porque tienen cosas muy curiosas y que suenan muy bien.
Una gran variedad de platos muy bien elaborados con cuidado y deliciosos. Rápidos y amables. Buena relación calidad/precio
Un gran local para disfrutar de una comida/cena diferente, original y sabrosa. Muy recomendable su sangría de cava, está espectacular. La presentación es un lujo y sabe tan bien como parece.
Muy recomendable.
Reserva para 2, viernes noche. Local muy bien climatizado y con una decoración a destacar. Al inicio servicio lento, aunque más tarde el turno recuperó su ritmo. Corta variedad en cervezas, pero servidas en copas de cristal fino. Nos decantamos por:
- pan de masa madre con aceite de tomate seco y alioli de mango. Delicioso en boca, sabor suave.
- croqueta líquida. Conjunción de sabores increíble.
- mollete de solomillo. Para repetir una y mil veces, tierno y sabroso
- tiradito de atún. Quizá el plato menos espectacular, excesiva maceración cítrica que impide valorar la calidad del producto. No lo repetiría.
- steak tartar. Presentación fuera de lo habitual, melosidad y equilibrio de sabores correcta, pero su precio algo elevado. Para probar al menos una vez pero no sería uno de mis principales
-tiramisú. Cómo postre nos dejamos aconsejar por David, el dueño, y fue todo un acierto. Nada que ver con el tiramisú habitual.
- maridaje : sangría de cava. Podríamos decir que es un agua de valencia, solo que servida en un recipiente que llama la atención. Si bien es cierto que su precio es algo elevado, hay que tener en cuenta que se entiende como un cocktail y se sirve en formato de un litro, más que suficiente para toda la cena.
Precio total 50€/pers. A tener en cuenta la elección de varios de los platos más caros de la carta. Se puede cenar por mucho menos y de manera satisfactoria. Repetiremos sin duda ya que nos quedaron platos pendientes como sus famosos huevos rotos o su ceviche de corvina. Recomendación: reservar en salón. Dispone de terraza externa e interna. Tienen el detalle de entregar toallitas húmedas al traer la cuenta. Tuvimos la ocasión de conocer al dueño y es un claro ejemplo de la voluntad por entregarse a cada cliente.
Súper recomendable. La calidad de la comida, el ambiente y el servicio geniales. Espacial agradecimiento al gerente. Gracias David, nos hemos sentido como en casa. Volveremos pronto.
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