Heladería L'angélys Les Ateliers

Al rico helado!!! Lo encontramos por internet y al ver que estaba tan bien valorado allí que fuimos. Trato excepcional, en un enclave tan bonito como la calle de Santo Tomé. Variedad de sabores y textura especial 👌 Probé el cucurucho mediano de menta y chocolate y stracciatela. De li cio so!!! Y nos llevamos tarrina de fresa para casa.

Caminando por el corazón histórico de la monumental ciudad de Toledo descubrí esta fantástica heladería artesana de verdad. De origen francés, la franquicia que nos ocupa comienza a tomar forma en nuestro país ofreciendo productos de calidad a precios razonables. Me llamó la atención el reclamo que ofrecían en el toldo del establecimiento y en diversos carteles situados en el acceso: ‘artesano y natural’, y entré para comprobar su veracidad. Dentro me atendió una empleada extremadamente amable y servicial, indicándome todos los sabores, tamaños y texturas de los diferentes helados y productos, así como la tabla de alérgenos que por ley nacional deben exhibir y/o disponer todos los locales de alimentación. Así, tras unos instantes de vacilación, me decanté por una tarrina de stracciatella al ser mi sabor preferido, y debo destacar la increíble cremosidad y elaboración realmente artesana del mismo. Puedo afirmar que es el mejor helado de este sabor que he comido jamás, y eso que he probado ya unos cuantos en muchas ciudades del mundo. De hecho, minutos antes degusté otro helado de similares características en otra heladería ‘natural’ cercana del centro y distaba bastante en términos generales, por lo que me quedo con el elaborado en L'Angélys Les Ateliers. Asimismo, ofrecen gustos heladeros muy diferentes a los que estamos acostumbrados, pudiendo probar más de 30 variedades. Para terminar, la relación calidad-precio es exquisita en este establecimiento recién descubierto, por lo que mi experiencia se repetirá en el tiempo. ¡Gracias por hacer posible la verdadera artesanía y naturalidad en un mundo -por desgracia- cada vez más empobrecido de valores y ética!

Estupendos helados, riquísimos, Alucino con el sabor tan logrado del de café,el de cereza Amarena espectacular y el de cerveza ...bufff. Me habían hablado de esta nueva heladería artesanal en Toledo y merece la pena. Y la que nos atendió nos dió a probar varios sabores antes de decidirnos, muy amable. Repetiré seguro.

Si cuando recorres las calles de Toledo te enamoras, cuando prueben estos helados ¡no se querrán ir nunca! Son helados artesanales de muy buena calidad, además de que son DELICIOSOS, el personal que atiende es muy amable, te explican cómo hacen los helados y se toman el tiempo para hacerte recomendaciones sobre los sabores. Sin duda es una experiencia para repetir cada vez que visiten la Ciudad.