Epheta

Fuimos una amiga y yo para echar el rato y el trato recibido por los camareros, José Luis y Daniel nos hará volver con total seguridad, sin duda nos hicieron disfrutar de un ambiente cómodo que es de agradecer. Las copas están a buen precio teniendo en cuenta la situación del establecimiento y tienen una buena cantidad.

Me he visto en la necesidad de coger el móvil de mi señora mujer para poner otra reseña a otro camarero espectacular, Jose Luis. Qué maravilla, estábamos más secos que Zahara de los Atunes en Septiembre, y viene cordialmente y nos pregunta: “señores, falta algo?” No queríamos nada pero nos vimos en la obligación de pedir otra copa, este señor no debería ser camarero, debería ser el auténtico lobo de wall street, qué manera de vender, qué manera de gestionar los comensales, sublime, sin palabras, GRANDE JOSE LUIS

Hemos llegado todos aquí hoy, tristes, desesperados, decepcionados con la vida en general, pero de repente se nos aparece lo que creíamos que era un ángel, pero no, era Yeray, que nos ha atendido lo más buena gente posible, ese señor es la viva imagen de la bondad, y nos ha invitado a sentarnos de la mejor manera posible, parecía que nos estaba arropando en la cama. Cuando nos hemos sentado vemos un relámpago ( extraño porque no estaba lloviendo ) pero no, era Mario, camarero que no tiene nada que envidiarle a Bandera Luna, un maestro del servicio y la hospitalidad, una maravilla total este experiencia que me llevo.