Buena Madre

Primera vez que vengo y salgo encantada. La comida muy buena, el ambiente genial pero lo mejor de todo sin duda, el buen trato de parte del personal, en especial de Aramis, el camarero que nos atendió. Estuvo todo el tiempo atento que no faltará de nada, nos aconsejó qué pedir, nos trajo platitos para compartir sin necesidad de pedirlos, y nos ofreció un chupito al pedir la cuenta. Sin duda volveremos gracias a su buen trato. No nos dió tiempo hacer fotos a la comida porque teníamos mucha hambre pero en resumen, bueno, bonito y barato.

Buenas tapas. La ensaladilla, el salchichón ibérico, el queso, y los chocos,... Todo buenísimo. Los chocos muy tiernos. Los huevos rotos con jamón para chuparse los dedos! Lo único es que tardaron mucho en servir la comida. Posiblemente porque era un martes, había mucha gente comiendo ( eso sí, con distancia entre mesa y mesa), y quizá faltaba personal en la cocina. Pero claro, para un día entre semana lo considero también normal. Muy recomendable.

De lo mejor de la zona. Tiene tapas y platos a buen precio. Los fines de semana tienen arroz. Las carnes están muy sabrosas. También recomienda el tataki y la mousaka y los postres. Es conveniente reservar mesa los fines de semana. Algún camarero nuevo necesita un cursillo de buena educación para atender al público y no ser impertinente con los clientes