Excelente lugar en el que solo dan cenas en los 2 meses de verano. Un ambiente estupendo y acogedor, un servicio fenomenal y unos platos muy bien servidos y cocinados, la decoración muy original.
Pedimos unas vieiras fantásticas y unos chipirones tiernísimos para compartir.
Después un revuelto de erizos y algas con sabor "a mar", un revuelto de grelos con langostinos , unas berenjenas con salmón y queso de cabra, todo muy bueno.
La única pega que le pongo es por el postre, una tarta de manzana sensacional, pero una ración escasísima, demasiado pequeña .
Calificaría “O Carrasco” como un restaurante muy acogedor. La comida estaba exquisita. De entrantes comenzamos con unos pimientos de padrón , zamburiñas , croquetas de jamón , zorza con patatas, poco arriesgados pero no nos defraudaron. De hecho debido al éxito de las zamburiñas pedimos otro plato. De segundos compartimos 3 personas el pollo al curry , a los tres nos encantó la salsa estaba muy conseguida al igual el arroz de guarnición que le acompañaba. Un solomillo compartieron entre dos personas , no tuve el placer de probarlo pero su reacción fue suficiente para saber que les encantó , destacaron sobre todo la salsa de champiñones que le acompañaba. El servicio fue muy agradable. Lo único que yo pondría de pega es el trato de Doña Carmela ya que fue seca y poco amable.
Un lugar precioso, una casa con diferentes estancias decorado con mucho gusto. La comida (carta amplia) excepcional y la atencion del personal destacable. Hemos estado muy cómodos, charlando y degustando platos con música de fondo.
Lugar mágico, hemos ido a cenar y tiene un encanto especial. La comida estaba muy buena y la atención excelente. Al final de la cena la propietaria cogió su guitarra y cantó unas canciones preciosas. Repetiremos sin duda.
El local es encantador, con un ambiente acogedor y romántico. La comida es exquisita y los precios razonables. La atención por parte del personal es inmejorable. Sin duda una experiencia a repetir.
Es un sitio muy bonito para ir en pareja o con amigos o para una celebración especial. El jardín es espectacular, la decoración es preciosa, me ha encantado como cuidan cada detalle. La comida muy rica y el personal muy atento y amable. Sin duda ha sido un gran descubrimiento.
Un lugar mágico desde que entras a él. Decoración maravillosa, atención inicial por parte de Carmela espectacular, el salón - terraza impresionante y la carta una delicia. Probamos los chipirones encebollados, el queso de Cabra frito con arándanos, la berenjena con parmesano, con salmón y brotes y las niñas Lasaña. Todo de 10! Y por supuesto el Albariño impecable.
Comida muy rica, aunque las raciones un poco escasas. Entorno y sitio precioso y muy acogedor. Los dueños encantadores así como el servicio
María Elisa Dapena González
+4
El sitio es precioso aunque tiene un acceso muy complicado. Es mejor ir andando un trocito y dejar el coche en la carretera principal. La comida muy rica y el trato excelente. Fuimos un día de los complicados… completos! Entonces hay que esperar un buen rato. Para ir sin prisas. Un lugar para conversar y disfrutar des-pa-ci-to.
Judit Meiriño Maquieira
+5
Me ha encantado del principio al fin, la dueña es excelente buena, atenta, amable, el sitio es precioso muy romántico y la comida está muy buena.
Tiene un cenador precioso y una terraza acogedora donde se está genial, un remanso de paz.
Abre solo dos meses al año, julio y agosto.
Está cuidando hasta el último detalle.
Fuimos a celebrar un cumple y la señora nos ha cantado las mañanitas y tocado la guitarra, es una auténtica delicia escucharla.
Recomendable 100%
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