A Curtidoría Restaurante

Pedimos unas croquetas, langostinos rebozados y volandeiras para compartir, todo estaba muy bueno. Como plato principales pedimos un arroz abanda, estaba bueno pero le faltaba un poco de sal. La atención fue muy buena, fuimos con un niño pequeño y el camarero Alberto fue muy majo y amable. La tarta de manzana es casera y está muy buena. Volveríamos a ir.

Muy buena selección de vino albariño para comenzar, las Volandeiras buenas para compartir una ración de 8, los pimientos de Padrón increíbles son los tallos y tuvimos la suerte que algunos picaban que tenia mucho tiempo que no tocaban, luego pedimos dos platos para dos (que compartimos entre 6) porciones bien completas que dio para repetir incluso, fideuá y arroz con carrilleras Para cerrar nos pareció curioso el mini gin Y el postre de manzanas para dos muy muy bueno

Un lugar único de la Galaxia. Luminoso, elegante, tranquilo, con una carta exquisita, un producto difícilmente mejorable, una confección original dentro de lo tradicional, un precio imbatible y el "elemento" diferencial: el trato. El tan traído y llevado trato con el cliente, que en La Curtidoría se convierte en amistad, aprendizaje, experimentación. Por cierto, la elección de platos, un acierto. Por ejemplo el pescado al horno, con tomate, patata y pimentón, consiguíó levitarme en la silla. El vino, guiados por la sumiller, una Gloria. El precio, una agradable sorpresa. Adoramos Santiago, donde cada tendero, cocinero, camarero, es el más docto y amable de sus embajadores. Y nos encanta este rincón. !Que Dios lo mantenga abierto y a toda vela muchos, muchos, muchos años!

Me había hablado mi pareja de este restaurante. Hoy fuimos los dos con el niño. No tengo palabras para describir lo bien qué comimos. Crujientes de langostinos, volandeiras y rossejat de fideos. Todo buenísimo y con un precio calidad increíble. Volveré para probar cada uno de los arroces que tienen en carta. Enhorabuena equipo!!