Centro Gallego

Hacía mucho tiempo q no entraba y hoy al pasar por aquí nos pareció q podíamos estar cómodos en un hueco en la barra....pedimos unos vinos y unas cervezas y nos dieron un surtido d croquetas q estaban bastante buenas aunq un poco destempladas . Nos llamó la atención una ración d rabas q estaba comiendo una pareja cerca de nosotros...así q nos animamos a pedirla. La racion generosa y t la sirven con salsa Alioli no sé si casera pero q merecía la pena Las rabas aunq buenas d sabor estaban más duras d lo q se puede entender cómo normal. También probamos una tapa d queso picón con nueces muy rica. El servicio y trato de las camareras muy bueno.....

Expresé sinceramente qué me han parecido los platos servidos, porque me lo preguntan, resulta que mi valoración coincide con Pedro, la persona que nos atiende, un gusto. Delicioso pulpo a la brasa. Pedro, como buen profesional, conoce la calidad del producto y su cocinado. Gracias Pedro por tu atención.

Hemos estado en familia entre semana, elegimos el menú del día, ajustado de precio con 5 primeros y 5 segundos a elegir. Todos los platos, ricos, bien cocinados, con aspecto muy limpio y cuidado y sabrosos. Los camareros fueron amables, el local limpio y elegante Los postres también variados y ricos (helado, tartas, fruta, yogur...) Fuimos con niños y nos dejaron adaptarles el menu Un gran acierto elegir este restaurante Enhorabuena, lo recomendaremos

Es un restaurante de diez, la relación cantidad precio es inmejorable, al igual que el sabor de la comida. Las raciones son abundantes y están exquisitas. El menú está a 15 euros e incluye la primera botella de agua que te pongan, ademas del pan, el 1er, 2⁰ plato y el postre. El lugar era muy limpio y el servicio rapidísimo (aunque es vd que cuando fuimos había poca gente). Pedimos pulpo a la gallega, el mejor que he probado nunca, en su punto y tiernísimo. Muy recomendado si buscas un lugar asequible para comer un menú.

Bar restaurante en pleno centro de Santander, local bonito de decoración agradable, la comida muy rica, estaba todo muy bueno, aunque el cocido montañés, fuera en un sólo plato, pero estaba muy bueno y el cachopo de segundo buenísimo. Los camareros estaban un poco sobrepasados, pero el trato fue correcto. El precio de acorde con lo que ofrecen. Mejor reservar, sobretodo si es en fin de semana.