Villa Blanca

Restaurante ubicado en el interior de Menorca, cerca de Sant Lluís, en una casa espectacular. Jardín muy bien decorado. Cenamos en el exterior aunque también tienen una zona debajo una pérgola, y en invierno zona interior para unas 30 personas. Está abierto hasta diciembre. Realizan actividades (música en directo), lo anuncian en istagram y facebook. Te atienden los propietarios, muy atentos, profesionales y amables. La comida de primera calidad, tomamos un capraccio de remolacha, huevos a la baja temperatura y solomillo de ternera (que nos contaron que traen de Galicia), que sirven con patatas o con berenjenas gratinadas y salsa al gusto. De postre, un buen crumble de higos. No sirven copas de vino, tienes que pedir botella entera. Tienen aparcamiento propio, muy cómodo y la reserva por la web funciona muy bien.

Un restaurante muy bonito y tranquilo rodeado de árboles y un jardín. Estuvimos cenando y pedimos diferentes platos, he de destacar las croquetas, hacía muchísimo tiempo que no probaba unas tan tan buenas como estas. También probamos la hamburguesa que era plato del día fuera de carta y estaba espectacular. También destacar la atención de los camareros, muy cercana y amable

Nos hemos parado a las 12.30 al verlo en carretera, no hemos comido, pero si hemos degustado sus cocktels, después de probar los de unos cuanto locales desde mahon a ciutadella, decir que aquí sirven los mejores, al menos los que tomamos con asiduidad, volveremos para probar la comida que si esta a la altura de sus cocktels no nos dejará indiferente.

Restaurante situado cerca de Cova n'xoroi. Facil acceso en coche. Dispone de parquing anexo al restaurante. Lugar tranquilo con ambiente relajado gracias a sus jardines maravillosamente cuidados, decorados e iluminados. 1. Comida: raciones pequeñas ajustadas al precio de la isla. Pedimos una carne y vino hecha cuando el punto solicitado era poco hecho. El vino blanco lo trajeron poco frio porque no lo tiene previamente refrijerado. 2. Servicio: profesional y atento a los comensales.

El sitio es espectacular, no es la primera vez que venimos. La comida es de muy buena calidad. El único inconveniente sería en algunos extras con un precio elevado como el agua "6€"?....y el postre que en nuestro caso fue un cheescake a casi de 10€ y sinceramente, estaba muy bueno pero no los vale. Por el resto, los camareros, el lugar etc, super bien, como siempre.