Simona

Excelente lugar en el centro de Reus, comida saludable, espectaculares sus hamburguesas, todo natural, para pasar un agradable tarde con sus excelentes tartas caseras, tárdear y cenar a un buen precio con gran calidad, sus camareras muy agradables y muy profesionales, no se puede pedir más, siempre como en casa

Céntrico y rodeado de historia en un entorno relajado con parking a tres minutos a pie. Amplia terraza y carta sencilla con oferta cuidada en la que el menú es imbatible en precio y calidad, puesto que la cocina cuida los detalles de los platos que salen a sala. Servicio atento y profesional, una de las mejores ofertas de la zona en la que repetir será obligatorio.

Recomendable lugar gastronómico en un enclave con encanto. Tranquilo pero con ambiente acogedor de terrazas para disfrutar en verano. Recomendable la ensalada César y hamburguesa de pollo con rucula, salsa de miel y escalivada. Utilizan vajilla vintage y el servicio eficaz. Disfrutar de un rincón histórico es un placer!!!

Fui a comer con una amiga y me encantó. Buen producto, se nota que lo priorizan y que hacen todo casero. Pedimos una limonada natural hecha por ellos, muy buena sin azúcar, también un humus de berenjena con pan de pita que me encantó. Luego la hamburguesa mmm.. súper tierna y con carne de primera. Tenían otra de salmón.. varias opciones. Nunca suelo pedir postre pero me animé y la tarta carrot cake deliciosa, hacen algunas ellos mismos y seguro que todas igual de buenas. A parte el sitio un encanto. Volveré seguro! La atención también genial!

Pequeño restaurante bien situado. La atención por parte de las camareras es impecable. Comimos dos menús completos y dos medios menús y fue más que suficiente para los cuatro. Todo está delicioso, el humus de berenjena impresionante. Muy buen precio (menos de 60 euros aún pidiendo vermut que no entraban en el menú) y muy buena calidad de los alimentos que usan, además de estar muy bien elaborados y presentados. Probamos los refrescos que elaboran (de agradecer que no todo sean marcas comerciales) y estaban muy buenos también. Sin duda un gran descubrimiento del que volver a disfrutar algún día.

Es un pequeño restaurante en un ubicación privilegiada en el centro de la ciudad. Trabajan con productos naturales y elaboran platos muy originales. Lugar ideal para personas vegetarianas o que les gusta comer con productos recién cogidos de la tierra. Ellos mismos hacen su pan de pita y cultivan sus productos. Tienen un menú que cambia cada semana. Disponen de terraza exterior. Lugar que sin duda hay que probar.