La Mirona

Un gran descubrimiento. Una cocina hecha con mucho cariño y eso se nota. El canelón de bacalao brutal, la escalibada buenísima, los calamarines para mojar pan, las alcachofas exquisitas,... Con ganas de volver y probar el resto de platos (el pulpo, el tataki de atún, los carpaccios,...) El local es pequeño y con mucho encanto, al entrar es como si te trasladases a otra década... Está regentado por un matrimonio que se esmeran para que la experiencia sea única, tanto culinariamente como en el trato. No hay carta física, así que escucha atentamente la explicación de los distintos platos que puedes pedir

Dieses Abendessen war etwas ganz besonderes. Landestypische kleine und geschmacklich ausgezeichnete Gerichte. Das empfehle ich gern für einen besonderen Anlass. Hier spürt man, dass mit Liebe gekocht wird und der liebevolle Service macht es rund. (Traducido por Google) Esta cena fue muy especial. Pequeños y sabrosos platos locales. Lo recomendaría ampliamente para una ocasión especial. Aquí podrás sentir que la cocina se hace con amor y el cariñoso servicio lo hace todo completo.

Peculiar lugar para pasar una velada tranquila acompañada unos anfitriones que te tratarán como un auténtico huésped. En cuanto a la propuesta culinaria hay que anticipar que no se dispone de carta física, sino que el propietario la relata con la gracia de una persona dicharachera. Los platos, aunque no se dispone de cocina como tal, son de productos de calidad, en el local solamente calientan platos previamente cocinados. Tiene una buena carta de vinos, de gran variedad, pudiendo encontrar algún vino inesperado. Se recomienda reservar pues disponen de pocas mesas y suelen llenar el aforo en cada servicio. Bastante recomendable.

What a truly special place in Palma 💖 but make sure you book!!!! Tenía muchas ganas de conocer La Mirona y para mí es unas de las experiencias culinarias que más me ha impresionado en Palma, muy diferente. El sitio es acogedor con un ambiente y atención muy personal y es más, anoche (9 de diciembre) había un grupo grande de amigos super simpáticos celebrando, todos disfrutando. Los dueños Amalia y Pere son simplemente encantadores y explican su menú verbalmente, ya que cambia siempre. Hay algo para todos los gustos y preparan todo con mucho cariño en una zona a la vista de los comensales Ayer pedimos: carpaccio de ternera (excelente), calamares rellenos de butifarra (super curioso), pulpo con Parmentier (muy rico) y una tarta de queso muy cremosa. Maridado por un buen tinto Priorat. Me parece excelente relación calidad-precio Con ganas de volver en el futuro y probar más comida rica!

Un lugar único. Pequeño (no entran más de 20 pax) y acogedor, una mezcla de colmado y restaurante con encanto. Situado en el centro de Palma, cerca de muchas de las zonas de interés. El servicio, una pareja encantadora, que contribuye a una experiencia muy personal. En cuanto a la comida, sencilla, una oferta limitada pero variada y muy trabajada. No olvides probar los canelones. Los vinos son un punto fuerte. Y los postres, deliciosos.