La Barra De Morata

Buscábamos un sitio más informal antes de emprender nuestro viaje de vuelta y vaya si lo encontramos. Buen producto, buena atención y muy cerca de la catedral. José, es un tipo estupendo, aconseja y recomienda sin atosigar. Empezamos con una marinera, que estaba muy buena. Pedimos una carne, pero mientras se hacía, nos sirvieron una ensalada de tomate con melva que era una auténtica delicia. Los tomates probablemente los mejores que haya probado. Cuando llegó la carne, estaba perfecta, en su punto, acompañada de una verduras en Juliana salteadas y unas patatas fritas caseras. Pedimos un par de copas de vino, y nos ofrecieron vino de Jumilla. Nos sirvieron Juan Gil Etiqueta Amarilla. Un vino más que decente. Por último compartimos un postre, Tarta de la abuela. Pero le han dado una vuelta de tuerca y la sirven con una panacotta de chocolate encima. Una delicia también. Para terminar nos ofreció un café asiático, café de tres colores con un toque cítrico que me sorprendió gratamente. En resumen, un lugar idóneo para tapear. Muy recomendable. No defrauda. Si volvemos por Murcia repetiremos seguro.

Buscaba un sitio donde comer de tapas y encontré justo lo que buscaba. Un camarero muy amable me preparó un plato con una tapa de queso, unas almendras y un zarangollo que estaba espectacular, acompañado de buen jamón, cortado a cuchillo. De postre, una ración de piña abierta y cortada en ese mismo momento y un café molido delante de mí. Y todo esto en un ambiente limpio y tranquilo. De 10