Llerja

Lo que voy a destacar fue el gran trato que tuvimos por parte de los camareros, además de la comida que estaba exquisita e de decirlo. El camarero que nos atendía nos facilitaba en todo momento lo que necesitábamos, platos para compartir, ayuda para la elección de los platos, por si nos quedábamos cortos, etc y acertó! No van a intentar sacarte el dinero por que si a base de pedirte platos que luego no puedes comérselos por que estas lleno. Para nada, nos aconsejo muy bien en este sentido. Si tuviese que volver, volvería.

He estado comiendo allí en dos ocasiones, el 23 de octubre y el viernes 10 de noviembre que repetimos porque nos gustó mucho el primer día. El local está como tiene que estar, amplio, buena barra, todo limpio, etc. Ambas veces pedimos menú del día, el primero cocido completo que estaba buenísimo y en cantidad de sobra, servido en su puchero de barro individual. El precio del cocido en carta son 27 € y en el menú con bebida y postre 20€, hay que ir los lunes si quieres un cocido estupendo y barato. El viernes 10 pedimos de menú también judías con matanza y codillo braseado, estaban para no hablarlas, solo comer y comer, buenísimas las dos cosas. También 20 €. El servicio perfecto, tanto el personal como el ajuar, vajilla y cubertería más que de acuerdo al precio, el personal super amables todos, atentos y rápidos. Una de las cosas que más nos gustó es que el vino del menú no es un peleón cualquiera, si no un Rioja crianza excelente y el agua que no te cobran, del grifo pero filtrada con un equipo en el mismo local. En uno de mis restaurantes de referencia en la Sierra y en todo Madrid. Por supuesto seguiremos yendo.

El menú que comimos estuvo muy bien verdinas marineras y carrillera y mi acompañante verdinas y merluza de pincho, a excepción del arroz con leche que lo hicieron demasiado líquido y un poco duro el arroz, estuvo bien preparado y presentado. Lo peor sin duda el tiempo de espera hasta que sirvieron y la espera entre platos.