Restaurante El Arte

Hemos comido muy bien, estaba todo riquísimo y la atención ha sido muy buena. Hablan de prepotencia y de bromas pesadas y no lo entiendo, la gente no tiene sentido del humor. Ah, y para el que se quejaba del agua, nos han explicado que es un agua filtrada que ellos sirven en botellas para que sea más sostenible y de proximidad, sin generar tanto residuo. ¡Pues estupendo!

Restaurante familiar. Comida espectacular es poco. Unos huevos rotos con un sabor increíble, unas verduras casi con vida de lo frescas. Un postre de la abuela que se te saltan las lágrimas y por supuesto agradecer el excelente trato de todas las camareras que nos han atendido. Sin duda un restaurante al que volveremos y no nos cansaremos de recomendar. Seguir así familia!!!

Muy buena ubicación, en plena plaza mayor, dentro de un espacio llamado "La Rinconada". Está reformado a modo taurino, muy original, con un primer espacio para consumir en barra o en mesa y otro espacio dedicado a las comidas... El plato fuerte es el chuletón, de muy buena calidad. El resto de lo que comimos puede ser mejorable, ya que las croquetas no son lo que eran antaño, el bonito estaba algo seco y encontré alguna espina. El servicio rápido pero los precios bastante elevados para lo que comimos (croquetas y calamares para compartir, pescado, y un chuletón para compartir) a unos 30€ por persona. Bien pero no para repetir habitualmente.

Íbamos a comer un grupito. Confiamos plenamente en el chef, le dimos nuestro presupuesto e información sobre las intolerancias de los comensales para que elaborase el menú. Resultado de 10. Todos los platos con una presentación exquisita y perfecta armonía de sabores y texturas. Gran elección de los vinos: - Aperitivo de bienvenida (crema de queso) con champán francés - Espárrago triguero con papada. - Timbal de boquerones. - Tostada de tuétano. - Popieta de bertorella. - Risotto de zamburiñas. - Miniburger de vaca madurada y foie. - Blanco D.O. Rueda Cuarenta vendimias y tinto Arzuaga. - Postre: coulant de chocolate con bola de helado y crocanti de chocolate negro. - Postre sin nata: tocinillo de cielo acompañado de fresas y crocanti de chocolate negro. - Postre sin azúcar: piña natural y fresas. - Café y licores. Y por supuesto, un local impecable en limpieza y decoración, una mesa preparada con muy buen gusto y una atención cercana e inmejorable. Sin duda, un restaurante para volver y volver y volver... 😋 Felicidades, sois un gran Equipo 😊

Fuimos a comer por casualidad camino a Valladolid y fue un acierto. Es una parada obligatoria si vas a Medina del campo o pasas cerca. La comida buenísima y el trato del personal, a pesar de estar llenísimo, fue increíble. Con los niños muy atentos. El precio super justificado a la calidad que ofrecen y muy bien ubicado.

Pues una sorpresa, la verdad es que el sitio aunque tranquilo ya que esta apartado del bullicio de la plaza ayuntamiento y todo los restaurantes de los soportales, se encuentra en un rincón pero el restaurante, hace todo lo posible por encontrarte a gusto. Sombrillas y una terraza exterior muy apañada. La comida, la verdad, es que estaba muy buena, por ejemplo la foto es un entrecot a la parrilla de vaca vieja que estaba muy muy buena y mi mujer comiendo un menu, muy completo, abundante y no caro.