Granier

En modo "autoservicio", ofrecen buen producto y a buen precio. La atención bien, habrá personal más o menos agradable pero bien. La marca ha tenido una campaña de difamación por sus precios low cost, y por el uso de alguna materia prima poco saludable, etc pero cuando uno elige comer alguna bollería, sea el sitio que sea, sabemos que siempre va a ser poco saludable. Es cierto que personalmente he comenzado a frecuentar éste sitio hace poco tiempo, pero lo elijo por la rapidez en el servicio básicamente luego por la variedad de productos . Su interior es pequeño, pero tiene una terraza bastante agradable para unas treinta personas y aunque está muy próxima al tránsito vehicular se está bien.

Sin sorpresas. Bollería, panadería, y pastelería. Frecuentada, situada en una esquina estratégica. Quizá su mayor rémora porque soporta tráfico tanto de vehículos como peatonal. O sea, que tranquilo, complicado. No va en demérito de su obrador, a la vista y con cierto aromilla galo. Más caro que algunos de la zona, pero ofrece productos recién hechos. Difícil, por el incesante trasiego de mercancía, tanto para llevar como consumir en su terraza (blindada de verde, un detalle), que 'cuelen' productos de semanas. Una reseña dixit. Igual se pasaron al hornear pero sería excepción. Café e infusiones y zumos de calidad.

Un café muy bueno y unos dulces espectaculares, echa un vistazo porque suelen tener ofertas muy buenas en dulces. Lo único que mejoraría, o mejor dicho haría de otra manera serían los bocadillos y pizza, cualquier cosa hecha hace tiempo y recalentado, jamás será como algo reciente. Por lo demás todo genial, situación envidiable y una buena terraza, además de atención eficaz. Volveré