Un gastro súper recomendable, su Chef Toño sabe combinar la cocina de toda la vida con una calidad excelente de producto zamorano y un toque joven y renovado, está combinación hace que todo lo que ofrecen en su carta merece ser degustado y alabado. Aparte de todo lo anterior, cabe destacar la cercanía del staff y la buena relación calidad-precio. Vamos siempre que podemos y seguiremos repitiendo.
Un lugar diferente, como su nombre indica. Especialidad pulpo, pero no les quedaba :( muy rica la carne, tortilla de bacalao y unos torreznos de lo mejor que he probado. El vino madremia, de Toro, una delicia.
Lástima que nos tocó una mesa súper escandalosa al lado que nos condicionó un poquito, pero el local tampoco tiene la culpa.
Si recomiendo al dueño que la cuenta de Spotify (o la plataforma de musica que sea) sea premium, porque los anuncios suenan súper altos y desconciertan un poco.
Esmerada atención por parte del dueño.
Una muy buena oferta hostelera en un buen lugar de Pozuelo de Alarcón. Recomendable toda la carta, cada cosa os sorprenderá con sus sabores y muy buena calidad del producto. El servicio muy esmerado a cargo de Ana, dueña junto a Antonio ( el cocinero ). Volveré tantas veces como me sea posible e invitare a conocidos y amigos a que pasen por allí a probar los torreznos, tomate con ventresca, lis callos, y la cecina de León. De postre la tarta de queso según me han comentado es espectacular!!! Y volveremos a probarlo. Muchas grácias por todas las cosas ricas que hemos podido disfrutar!!!.
Ya son varias visitas y no nos defraudan. Fuimos 10 personas y degustamos tres de sus fabulosas paellas: valenciana, negra y marinera. Quienes fueron por primera vez, quedaron encantados con los sabores.
Local coqueto y acogedor con amplia barra, salón interior y terraza exterior que destaca por dos cosas que en hostelería a veces, juntas, cuesta encontrar y que son CALIDAD y ATENCIÓN. Excelentes productos que luego son potenciados por Antonio en la cocina, logrando con mucha diferencia, una RCP muy superior a otros locales de la zona y sin ánimo de por ello, desmerecer a nadie. La carta tiene guiños a la gastronomía zamorana, donde la carne tiene una importancia capital, un ejemplo es el carpaccio de entrecot con lagrimas de AOVE, que está delicioso, o el costillar de cerdo cocinado a baja temperatura que se deshace con el tenedor... pero si hay algo que me haya entusiasmado, han sido los torreznos, sencillamente espectaculares, para mí, mis favoritos en Madrid, obligado pedirlos junto a las croquetas de rabo de toro y cochinillo con manzana 🍏, todo un volcán de sabor en el paladar... además tiene una carta de vinos muy interesante, siendo la D.O. Toro la protagonista como no podía ser de otra manera...y para terminar la faena, una increíble tarta de queso hecha con 5 tipos de queso distintos... La atención, es inmejorable desde el primer momento y el orden, la limpieza y el ambiente del local ponen el resto. Conviene reservar con antelación, lo recomiendo MUCHO
Cocina genial y por fin un sitio en la zona que pone buenas tapas con las cervezas, a parte de tener los mejores torreznos. El resto no se queda corto, los boletus de escándalo y el pulpo... todos los platos están muy muy buenos. No solo repetiré si no que seré habitual.
*Actualizo con la tapa del concurso de tapas de pozuelo. Tremenda.
Comimos media tortilla con trufa, una ración de cecina y croquetas de arroz negro con alioli y de rabo de todo.
Todo estaba buenísimo, sin duda para repetir.
El servicio fue excelente, en todo momento preguntándonos qué tal; muy atentas.
Si eres amante de las tartas de queso la de aquí de 5, te va a encantar.
Además pedimos dos cervezas y 3 refrescos en total fueron casi 65€, no es barato pero está acorde a la zona también.
Hemos estado comiendo y ha estado todo exquisito. La calidad de la comida muy buena. Volveremos sin duda
Hemos venido a este sitio recomendados por unos vecinos. El trato ha sido estupendo. La comida muy rica: los torreznos son de los mejores que he probado. La tortilla de patata también estaba muy buena (del tipo cuajada). También hemos probado las alcachofas, croquetas, oreja de cerdo y callos. Todo muy rico. Comida elaborada y con ingredientes de calidad. El restaurante por dentro es muy acogedor.
Un sitio estupendo donde tomar algo / comer. La comida está muy muy buena, a destacar las croquetas de rabo de toro. El servicio es súper amable y rápido, sin duda volveré. Calidad-precio muy bien.
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