La mejor experiencia, el servicio excelente y pues el recordar que aquí fue grabado el video de la canción aire soy de Miguel bose en 1986 y lugar frecuentado por Luis Miguel Dominguin gran torero
Queee lugar!!!
Estoy encantada de comer ahí, vale cada centavo!
Hemos ordenado los mejillones, albóndigas y los ravioles de 3 quesos. Quedamos encantados de lo rico que estaba cada uno de los platillos.
El servicio espectacular, todos muy atentos y amables.
La tarta de suspiro de chocolate uffffff
Salimos muy contentos, y sin mencionar que la plaza de Santa Ana es bellisima para cenar.
Si pasan por ahí tómense una caña o un tinto por lo menos.
(Hay restaurante y terraza)
Siempre venimos a picar una buena tapa, precios razonables. En la misma plaza de Santa Ana en el centro de Madrid
Cervecería clásica. Situada en la Plaza de Santa Ana, en pleno centro de Madrid. Muy buenas raciones. Buena atención. Recomendable.
Cristhian F Hernandez S
+4
Es un lugar para tomar unas buenas cervezas y combinarlos con algunos platillos. Me pedí unos calamares y estaban bien pero deberían acompañarlos con algo mas, se veían solos. Adicionalmente agregaron de cortesía unas aceitunas. El personal es amable y el ambiente agradable.
Magnífica visita y esperaba encontrarme con esta maravillosa experiencia 😉.
Llevaba tiempo poder tener la oportunidad de hacerles una visita y por fin llegó el día y la espera mereció la pena ☺️.
Aunque me encanta el local por dentro, tiene ese toque de antaño, pero hoy en Madrid hizo un día maravilloso y nos sentamos en la terraza, pero volveremos a disfrutar del interior.
En cuanto a la comida, evidentemente me hubiera pedido toda la carta 🤭, pero poco a poco .
Tortilla de diez 🔝.
Filete de merluza muy muy rico 🤤🙌.
La salchicha del mismo modo espectacular.
Enhorabuena y nos volveremos a ver 👌
Después de un largo día, decidí ir a la plaza Santa Ana a tomar una cervecita y descansar. Me encontré con la cervecería Alemana y la mejor elección. Me atendió Miguel y la verdad que súper bien he quedado encantada, cerveza bien fría acompañada de unas olivas y patatas chips. Probé la tortilla de patatas y salí con las pilas cargadas. Muchas gracias, sin duda cuando vuelva a Madrid vengo a hacer una visita!
![5]( "Recensione")
La Cervecería Alemana nace en 1904 cuando un grupo de industriales alemanes deciden abrir un local para el consumo de cerveza, por aquel año se anunciaban: "bocadillos de pasta de salmón, langostinos, anchoas y sardinas, todo bien acompañado con cerveza El Aguila".
En 1924 Ramón González Peláez se hace cargo del negocio y sus descendientes han continuado con el negocio hasta nuestros días .
Diversos literatos instalaron aquí su lugar de reunión, también Ava Gardner y Ernest Hemingway que le gustaba sentarse junto al ventanal. Como anécdota graciosa en 1950 un caballo se coló dentro, ¿buscando a su amo o por el olor de las croquetas?
Situada en la plaza de Santa Ana, tiene una agradable terraza a la bulliciosa plaza.
Me pedí un pincho de tortilla y me regalaron una tapa con aceitunas y unas mini empanadillas muy ricas, la tortilla rica de sabor, pero al calentarla la dieron una cocción extra (siempre que me preguntan digo del tiempo)
En resumen un establecimiento indispensable de Madrid para disfrutar de una rica cerveza, unas raciones, etc mientras contemplas parte de la historia de Madrid (o no si te sientas en su agradable terraza)
livinglavidaerasmus uk
+5
Compartimos unas tapas entre tres y comimos súper bien. Terraza muy agradable y el camarero que nos atendió hizo un servicio excelente. Raciones generosas y a buen precio - los calamares, albóndigas y croquetas 100% recomendables
Nos cobraron 5euros más de lo indicado por la botella de vino, lo cual nos rectificaron al instante.
Buen bar.
Precio medio.
Clásico bar de la plaza de Santa Ana.
Ideal para familia y amigos.
Comidas clásicas españolas como croquetas, ensaladilla, calamares.
Dispone de amplia variedad de cervezas.
En el interior tiene una decoración clásica madrileña de comienzos de siglo XX.
No hace falta ir con reserva.
Atención muy buena, el lugar increíble, estas en el 1900.. es comer en una cueva del tiempo, realmente muy bonita experiencia...
En cuanto a los callos madrileños, no me terminaron de sorprender, tenía otras expectativas debido a las referencias..
En fin, un muy bonito lugar para una salida diferente en Madrid.
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