Si quieres tomar el típico bocadillo de calamares en la Plaza Mayor, es de los mejores sitios para hacerlo. Eso sí, siempre está lleno e intentar hacerse con una mesa es misión imposible. Por poner un pero las mesas no son nada cómodas por pequeñas y por estar pegados unos a otros, pero todo eso forma de su encanto. El precio es más que razonable. No os perdais sus bocadillos de boquerones en vinagre para los que como a mí no les gustan los calamares.
Sitio perfecto para probar el típico bocadillo madrileño de calamares.
Hay dos filas, una para comer dentro y otra para pedir para llevar. No hacen reservas, así que toca esperar ya que suele estar muy concurrido.
Los bocadillos están muy buenos y llevan una cantidad generosa de calamares. En general la relación calidad-precio es muy buena.
El servicio es muy rápido. La dinámica es estar el tiempo que te cuesta comerte el bocadillo y marchar, ya que las mesas no son especialmente cómodas y la gente está en constante movimiento.
Los bocadillos de calamar están geniales ! Solo cuesta 3,50€ El local es pequeño y hay que hacer cola pero merece la pena por lo rico que están ,aunque una vez que entras la atención es inmediata y si tienes prisa los puedes llevar !
Trabajan muy rápido, hay dos colas, para llevar y para comer en el sitio, los bocadillos de calamar están muy buenos. Aunque los camareros están a tope, a veces no les da tiempo recoger y limpiar las mesas. Recomiendo dejar las mesas limpias para facilitar el trabajo del personal y por respeto hacia los siguientes que van a usar la mesa.
Primer bocadillo de calamares que pruebo en la vida y creo que elegí el mejor sitio.
Estaba super rico.
Todos los bocadillos cuestan 4€, la jarra de cerveza de 75cl 5€.
Sitio barato para lo que hay por la zona.
Volveremos!!
Fuimos a probar los míticos bocadillos de calamares. El servicio para take away es rápido y el bocadillo cuesta 4€.
Si te quedas a comer, hay cola por lo que tendrás que esperar a no ser que tengas suerte.
En mi caso, me gusto el bocadillo aunque le añadiría algo de mahonesa, pero para gusto los colores
Ideal sitio para probar el típico bocadillo madrileño de calamares. Cantidad generosa; calidad-precio muy correcto. Servicio rápido, es un lugar para estar el tiempo exacto de comerte el bocadillo y marchar, ya que, está muy transcurrido y el tipo de mobiliario es a lo que acompaña. Pero muy recomendable.
Una de las tradiciones que han acompañado la imagen de Madrid desde hace décadas, han sido sus bocadillos de calamares de la plaza mayor. Sin gran pretensión culinaria, permanecen año tras año. La campana es uno de los locales que simboliza está tradicion. Habitualmente con colas que esperan mesa, comer en barra o recoger los bocadillos de pan blanco, repletos de calamares, con su particular punto de fritura y de sal. La atención de sus responsables es amable, con servicio rápido y espacio bien gestionado para evitar acumulaciones. Una experiencia grata una y otra vez.
Tengo que reconocer que iba al local de al lado llamado “La Ideal”, pero estaba cerrado por vacaciones y decidí probar suerte en este. Había cola en la puerta y como éramos un grupo grande decidí coger el bocadillo de calamares para llevar, no tardaron nada en dármelo (menos de 30 segundos), por 4€ que cuesta no está nada mal. El pan blandito y los calamares bien fritos. Por el precio que tiene y estando en plena Plaza Mayor de Madrid no se puede pedir más.
Local ubicado junto a la Plaza Mayor, este establecimiento tiene la fama de ofrecer uno de los mejores bocadillos de calamares de Madrid.
Una de las tradiciones que ha acompañado la imagen de Madrid desde hace décadas sin duda han sido sus bocadillos de calamares de la plaza mayor. Sin gran pretensión culinaria, permanecen año tras año. La campana es uno de los locales que simboliza está tradición. 🔔
Si visitas la plaza Mayor, no olvides pasar por la campana y probar este bocadillo.
Por experiencia ya de años y como recomendación, mejor pedirlo para llevar y así te ahorras la fila para entrar que para tener sitio dentro del local suele ser muy complicado y si hablamos de viernes o sábados peor.
Además, puedes sentarte en la plaza a comerlo o incluso seguir con la visita turística mientras disfrutas de este bocata.
Hay una diferencia bastante grande porque al pedir los bocatas para llevar, te ahorrarás bastante tiempo, por no decir que te lo dan de inmediato y apenas tienes espera.
A nivel económico está bastante bien de precio, todos los bocadillos están a 4€, el pan que ponen está bastante tierno, no muy grande en tamaño, pero para la cantidad que le añaden es muy rentable.
Personalmente, con las temperaturas frías de invierno y para complementar el plan navideño, no olvidéis hacer una visita por aquí ya que merece mucho la pena.
¡Muy recomendado!🎄
An error has occurred! Please try again in a few minutes