Las Delcalzas

El Monasterio de las Descalzas Reales se rige como Monasterio de clausura y al visitarlo, siempre como visita guiada, nos hacen la recomendación de hacer la visita manteniendo el silencio para no perturbar la vida monacal de sus moradoras y también nos prohíben tomar fotografías de las maravillas interiores. Este Monasterio fue Palacio habitado por los Reyes de Castilla y en el nació en 1536 Juana de Austria que lo transformó en Monasterio en 1559. En este Monasterio también vivió la Emperatriz María de Austria y en él murió en el año 1603 La visita es muy gratificante, muy recomendada.

El Monasterio de las Descalzas Reales, en pleno corazón de Madrid, constituye un espacio de culto y tranquilidad donde el visitante puede observar el contraste con el bullicio de la capital. Atención al guía: Mucho nivel! Una experiencia de 10 hacer la visita con él! 100% recomendable! Te quedas sin palabras ante el espectáculo visual y la historia que se va desarrollando sala tras sala...

MONASTERIO DE LAS DESCALZAS REALES. PLAZAS DE LAS DESCALZAS. MADRID. 1559. Fundada por Juana de Austria, Princesa de Portugal que Nació y Murió en este Palacio. Impresionante su Historia, Arquitectura y su Vida Diaria. Más de 10 000 obras de Artes entre Pinturas, Tapices, Belenes, Esculturas, Tumbas y Orfebrería de todas partes del Mundo. La Vida de las 18 Monjas Clarisas obliga a los visitantes a un ambiente de Silencio y un aforo limitado no interrumpen los Horarios de Oración, su tiempo Litúrgico y su trabajo en la Casa y el Huerto. Una visita Obligada a este Monumento de Bien de Interés Cultural.

Por fuera se ve como un edificio de un estilo renacentista poco definido y poco atractivo pero en su interior tiene un auténtico tesoro artístico y sobre todo pictórico en salas repletas de cuadros, esculturas religiosas y todo tipo de ornamento religioso realmente maravilloso y muy, muy bien restaurado y mantenido con mucho mimo y se nota. La escalera principal es de las más impresionantes que he visto nunca!... por los frescos que tiene igualmente perfectos en su restauración y mantenidos en un estado perfecto. Lo malo es que sólo son visitas guiadas y no da tiempo para admirar muchas obras como se merece cuando ya una vigilante que acompaña a la guía te mete prisa para seguir adelante como si fuera una pastora con su rebaño de ovejas, y ésto resulta bastante forzado al visitante. Por otro lado la guía un tanto seca no resulta nada amena ya que apresurada ni da pie a que alguien pregunte sobre nada de lo que explica. No se puede hacer ninguna fotografía dentro de nada y hay que tener apagado o silenciado el móvil debido a que hay 18 monjas de clausura allí habitando y que por respeto tiene que ser así, esto puede parecerme más o menos correcto, pero hacer fotos con el móvil si no hace ruido al disparar y sin flash...qué más les dará?, he estado en sitios religiosos tanto o mejores que éste y he podido hacer fotos. Pero todo está de manera que no es habitable, las salas están preparadas para que todo sea visto de exposición sin mobiliario para usar, la iluminación y todo sobre los cuadros, con lo cual dudo mucho que ésas zonas que se enseñan sean para que estén las monjas haciendo su día a día e incluso ya dicen que sus aposentos están en otro lado del edificio...así que llego a la conclusión de que es una pena que por éso éste lugar no pueda ser un museo de visita libre para poder administrar todo con más tranquilidad. Éste aspecto tendría que ser más tenido en cuenta, por que a éstas alturas en un lugar tan céntrico y por tanto ruidoso del actual Madrid...un convento con mojas en clausura restringiendo por ello que no se pueda admirar el arte de su interior como se merece me parece un gran desperdicio, si yo fuera una de ésas monjas allí recluidas preferiría estar en un lugar más tranquilo y dejar que la gente admire ése arte almacenado allí plenamente. Por otro lado...pensaba que con la visita también te daban paso al interior de la iglesia pero no es así, otra cosa incomprensible. Aún así bien merece la pena visitarlo. Se merece 5 estrellas, pero le doy 4 por lo que he comentado.

Visita recomendada si te gusta el arte sacro. Algo breve en cuanto a la totalidad de lo que este edificio alberga pero esta limitación se debe a la clausura. Creo que además al ser guiada y no poder ir por libre se te escapan cosas y no puedes detenerte cómodamente a contemplar algunas obras que lo merecen, aunque como digo, eso no le resta belleza al sitio ni a su patrimonio.