Devinums La Parrilla

Nos encantó. El lugar es bonito, el servicio muy bueno y la calidad de la comida muy buena. Carta de vino extensa, carte de comida variada, comida para niños y variedad en general. Terraza agradable y dos salones para comer. Pedimos para compartir y fueron rápidos, atentos y profesionales. Repetiría. Muy buena relación calidad precio.

He ido en otras ocasiones y muy bien. Los entrantes, los clásicos, pero cuando llegó el segundo plato, esta vez pedí un arroz de jamon iberico, setas y verduras, por salir de la carne de siempre. Mejor olvidarlo y no entraré en detalles... Básico no!! lo siguiente y por el precio 18€...ni siquiera se salvó el ali-oli, creo qué ese día no fue el del arroz para su cocinero.

Este local me gusta mucho, la comida es buenísima y el personal muy agradable. Tiene un inconveniente: la carne a la piedra realizada en la propia mesa... el local se llena de humo, pero hasta el punto de que parece que hay niebla, es insoportable y abren la puerta de la calle para que el humo se vaya, consecuencia: mucha tos hasta que el humo se va, la ropa oliendo fatal y frío por la puerta abierta. Deberían poner solución a este tema. Los precios un pelín caros

Restaurante acogedor y bien decorado, fuimos en familia, 8 adultos. Los camareros muy atentos en todo momentos, nos atendieron nada mas sentarnos y los platos no tardaron en llegar. Pedimos varios entrantes para compartir, entre ellos un par de ensaladas, la vinare y la de queso de cabra, las cuales son bastante grandes y cuestan 13€. También pedimos sepia a la plancha con alioli, muy tierna y rica (13,9€) y croquetas de jamón, en la ración vienen 6, cremosas y von muy buen sabor (10€) Para continuar pedimos platos individuales, aunque los compartimos, entre ellos dorada al horno (17€), solomillo de ternera (22€), solomillo de cerdo con salsa de setas (18€) y arroz con bogavante (21€), todos los platos un acierto Y como no puede ser de otra manera había que probar los postres, mi favorito sin duda la torrija, caramelizada (6€) venia acompañada de helado de cafe. Volveremos sin duda!

Fuimos la familia a comer dos adultos y dos niños. Tiene una carta amplia con entrantes, platos de carne y pescado y variedad de postres. El local por dentro no lo llegamos a ver, ya que nos quedamos en la terraza, es muy amplio y continuamente están los camareros atendiéndola por lo cual, está cuidada y atendida, en poco que nos sentamos nos empezaron a atender. He de decir que los camareros fueron muy correctos y atentos, nos tomaron nota de la bebida y acompañaba un aperitivo (sin coste) pero al ser un restaurante tan concurrido...tardaban en salir los platos, a cuenta gotas, tanto es así, que el camarero nos reclamo las berenjenas a la miel, que pensaba que se habían olvidado de ellas. La relacion calidad precio es muy acertada, las raciones en su cantidad, y muy ricas, tomamos además un postre cada uno y fue un acierto el tatín de manzana y la tarta de choco, riquísimos. Como detalle a la tardanza de las berenjenas tuvieron nos ofrecieron invitarnos a un chupito final (que no nos tomamos, aunque valoro como detalle). Un 10 a los camareros por su atención y corrección en todo momento.