Me ha sorprendido para bien. Los camareros son súper majos y el ambiente muy bien decorado.
La comida me encantó. Las alcachofas fueron un diez, algo tan sencillo pero tan bien hecho. Las patatas bravas muy buenas, una interesante reinterpretación. Y el tartar de atún tenía un montón de sabores, temperaturas y texturas, fue uno de mis favoritos de la noche.
Lo único que no repetiría son las croquetas, estaban blanditas y a mí personalmente me gustan crujientes por fuera.
El Ice Roll es muy contundente y algo empalagoso pero estaba muy bueno, lo recomiendo a los amantes del dulce como yo.
Precio razonable, salió a 30 euros por persona. Seguro que volveré!
Gran descubrimiento en Las Rozas para desayunar o merendar especialmente. Un lugar precioso, decorado con mucho gusto, y con un servicio amable y profesional:
- Ubicación: Zona de los Castillos.
- No se aparca mal.
- Tamaño: Muy amplio y cómodo.
- Limpieza: Muy exigente.
- Servicio: Muy profesional.
- Calidad: Fantástica.
- Cocina: Moderna y actual.
- Precio: Muy asequible. 15-20€/ persona.
- Accesibilidad: Adecuada.
- Digitalizado: Bastante
Siendo las 18h de la tarde, decidimos ir a merendar.
El sitio es muy chulo, de estética moderna y actual.
Al llegar, había mesas disponibles. Nos dieron opción a elegirla.
He de reconocer, que el ambiente olía muy bien a ambientador y eso se agradece y gusta.
De la amplia carta que tienen, optamos:
- 1 smoothie de piña colada.
- 1 café con leche.
- 1 Roll de canela rollerie de 2 unds.
A niveles generales 7/10.
A tener en cuenta:
La composición del smoothie, sabor muy sutil a piña. Faltaba algo de más sabor.
La atención del personal cercana, servicial y atenta.
Volveremos a probar más opciones, menú de diario, brunch....
Recomendado! 👌
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