Restaurante Balague

Entorno muy bonito, pero la verdad es que, no se si tuvimos mala suerte, no había ningún plato de los que pedíamos, nos decían que no quedaba o que no lo podían preparar porque les acababa de llegar el genero, de tal modo que las posibilidades de elección se quedaron muy reducidas. La comida, que si que tenían, estaba bien.

Solamente me tomé un par de copas pero el sitio espectacular. La casa de Omar Sharif estaba cerrada ya que sólo abre en horario de museo. Las leyendas cuentan que la perdió en una apuesta.... El barman Mario un crack, una atención muy buena por su parte. Volveré para degustar los platos. Totalmente recomendable

La comida muy buena, igual que la atención, solamente puntualizar que cuando hemos llegado y hemos pedido si tenían mesa nos han mirado de arriba a bajo ( esa ha sido nuestra sensación) . El lugar es maravilloso, muy tranquilo y con unas vistas geniales. Lo recomendamos 100%. Pedimos pescado blanco y atún, y de postre el brownie, estada muy bueno todo.

No puedo opinar sobre el restaurante. Pero si del bar-pub El lugar es precioso, sobre todo al atardecer, instagrameable total; cuevas, espacios recogidos para tomar algo, colores, vegetación... Lastima que tienen cerrado algunas partes especialmente bonitas. Los martes cierran y es bueno mirar los horarios de apertura

Un lugar encantador y diferente. Sólo el simple hecho de la localización ya es un sitio para visitar, si a eso le añades la exquisita cocina, es para repetir 1 y 1000 veces. Platos bien presentados, con mucho sabor y a una relación calidad/precio perfecto. Cuando volvamos a la isla este será uno de los sitios que volveremos.

Las instalaciones espectaculares!!, el restaurante no lo recomiendo, no tiene nada de gracia ningún plato, ni las croquetas de plátano con chorizo eran insulsas. Les ruego que cambien el concepto de restaurante, porque el sitio lo merece!!, si vas a visitarlo tomate una copa o algo de beber en el bar. Las peores papas arrugadas que tomé en la isla!!!

Fuimos sin reserva y nos atendieron sin problemas. Comimos una ensalada templada (que estaba muchísimo más rica que la pinta que tenía), paletilla de cordero y carrillada y de postre, raviolis de piña y apple crumble (q estaba muy bueno). Al leer la carta y en un restaurante de esta categoría, quizás te esperas un poco más de elaboración en el acompañante a los platos principales pero la comida está muy rica. Los precios no son excesivos pero creo que también se paga por la ubicación, por el sitio dónde estás cenando. Los camareros muy amables y atentos. Muy profesionales.