La Carboná

Quite simply the tasting menu with sherry at €45 is the best value meal my partner and I have ever had. Stunning food and setting. A must if you like good food

La reserva en el restaurante fue a través de su perfil de Instagram, respondiendo enseguida a la petición. Nos presentamos en el local un poco antes de las 14 horas, estando prácticamente vacío (aunque poco a poco se fue llenando, incluso alguna mesa con doble ocupación, algo que me parece meritorio en esta época de COVID...). El restaurante se encuentra en un amplio local que funcionó en su momento como bodega de vinos de Jerez, pudiendo observar las antiguas vigas y algunas de las botas. Como ese mismo día era nuestro aniversario, decidimos celebrarlo a lo grande pidiendo el menú largo, acuñado Solera, que incluye maridaje con vinos de Jerez. Paso a relataros las delicias que nos sirvieron: -Paté de ave con velo de Pedro Ximenez con vermú rojo de González Byass -Para mi acompañante tartar de langostino con velo flor y ajoblanco de ajo negro, para mí, como soy alérgica a los crustáceos, prepararon un riquísimo Tartar de tomates de Conil soasados a la brasa con guacamole, ambos platos acompañados por Manzanilla en rama Arboledilla Poniente, de Barbadillo -Vainas verdes a la carbonara de atún de almadraba con Fino Cruz Vieja, saca exclusiva para La Carboná, de Bodegas Faustino González -Mollejas de ternera glaseadas con Palo Cortado, apionabo y vegetales con Amontillado del Duque, de la Bodega Gonzalez Byass. Además nos invitaron a un par de copas de una de nuestras bodegas de Jerez favoritas, Urium. -Rodaballo con velouté de Palo Cortado y wok de vegetales (el pesacado es de lo mejor que he comido nunca, y eso que vivimos en Galicia) con oloroso Lorente Barba -Rulo de cordero a baja temperatura con Ras al hanout, alcaparras encurtidas en oloroso y flores con Harvey's Cream -Cítrico pasión: bizcocho de limón, crema de cítricos y fruta de la pasión con Brandy Fundador Triple madera solera Gran Reserva -Chocobrandy: bizcocho de cacao con helado de Brandy de Jerez, espuma de chocolate amargo y crujiente de Toblerone con Cruz Vieja elaborado a base de Pedro Ximenez por Bodegas Faustino González Tras la comida nos permitieron entrar en la bodega para ver el velo flor, que se encontraba en frascos de cultivo celular, como los que se usan en laboratorio. Con dicho velo preparan, como habéis podido comprobar, pan, salsas, etc. Por cierto, el chef salió varias veces a comprobar que las mesas estuviesen a gusto y pudimos hablar con él unos minutos; se llama Javier Muñoz Soto y se trata del hijo de los fundadores (de hecho nos pareció muy joven), quienes abrieron el restaurante por 1994, como asador de carnes. Gracias a la incorporación de Javier, la carta y el estilo han evolucionado, pero siempre con el vino de Jerez como base de la mayoría de los platos, de ahí que le apoden el "Chef del Sherry".