Mari Carmen Sanchez Aguilera
+4
Es un sitio muy cómodo y su ambiente tranquilo. Hay sofás en las mesas. Tienen muchos camareros y no esperas apenas.
La comida está rica.. son raciones pequeñas pero todo muy bueno.
Restaurante en el casco antiguo de mallorca. El local es muy grande y es muy bonito. Luz tenue y decoración muy acogedora y elegante. Todo lo que pedimos estaba muy bueno. Mención especial a los puerros que estaban de diez y al bocado de chipiron. La tortilla de alcachofa con sobrasada tb muy recomendable y el tartar de atún buenísimo. En resumen un restaurante para hacer unas tapas con amigos en un ambiente muy agradable.
El precio no es barato pero tampoco excesivamente caro.
Hacía mucho que no volvía a este restaurante y la verdad es que no defrauda, está ubicado en la calle San Jaime y tienes que estar atento para no pasar de largo pero al entrar descubres un restaurante acogedor y cálido con unos platos increíbles y un servicio excelente.
No os podéis perder el sandwich de rabo de toro y los tacos de bacalao. No es un restaurante económico pero merece la pena visitarlo.
Nos pareció impresionante, tanto la cena como la atención y el servicio. Excelente relación calidad precio. El lugar precioso, un reservado con tan sólo 5 mesas.
Repetiremos sin lugar a dudas
Local espectacular, atención 10 gente encantadora, comimos muy a gusto los platos muy ricos. Seguro que volveremos
Beatriz Cordero Pancorbo
+5
Local precioso, servicio inmejorable. Variedad de vinos y la comida muy rica, se nota que está hecha con mimo.
Salimos a 44 por cabeza con vino comida y una copa, así que calidad precio esta genial. Pedimos: unos pinchos individuales (uno de anchoa con queso y otro de bonito y pimientos), tortilla de alcachofas y sobrasada, y unos minisanwiches de rabo de toro. Todo muy jugoso.
Un lugar ideal para degustar la cocina mallorquina. Carta para los más exigentes paladares en todos sus aspectos, para amantes tanto de la carne como del pescado así como una extensa y variada carta de vinos, en un local íntimo y cálido. Servicio atento y esmerado. Precio medio alto. Recomendable.
4.5 Ubicado en un callejón cerca de Jaime III. Hacer reserva porque se llena y si es posible en la bóveda, que por lo que entendí es del s.XIV, nosotros no pudimos reservarlo pero estuvimos en una de la salas que para llegar pasamos por una parte de la cocina, el trato de los camareros fue muy correcto y la comida de calidad. Variedad de pescado, carnes y tortillas. Pasamos un buen rato la pena fue que justamente en la misma sala tuvimos a un grupo bastante ruidoso que no paro durante el tiempo que estuvimos cenando.
No le hice foto al postre pero la chia con coco y fresa estaba buena.
Fui a cenar con mi pareja y fue excelente. El servicio INCREÍBLE, nos atendió un chico llamado Javier y de verdad que demasiado amable, nos explico todo, nos ayudo con la carta, super atento y rápido. Los productos de primera calidad se notan en cada de sus platos. Las croquetas de chipirones un 10/10. Super recomendado. El postre lo recomendó Javier y dio en el punto, probamos la milhoja de crema y fue alucinante. Soy amante del cocktail Bloody Mary y Javier me lo hizo y espero a que lo probara para ver si me gustaba. Me encanto todo.
Muy rico todo y buen ambiente. El lugar está un poco escondido, pero al entrar te encuentras con un restaurante lleno de ambientes diferentes y con mucha onda.
El pan con tomate y la tortilla de alcachofa con sobrasada mis favoritos.
Los tragos muy buenos también.
Hay que reservar.
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