Mesón El Viso

Comida buenísima y trato estupendo. La croqueta de bacalao una delicia, súper cremosa. Pese a que tiene premios en la tortilla de patata y croqueta de torrezno ( que si estaban buenas), tiene muchos otros platos más elaborados que a mi parecer , merecen más la pena. El huevo cremoso trufado y el solomillo con foi, brutal y los postres caseros muy buenos. La única pega que nos tocó esperar 30 min a pesar de tener reserva, pero tampoco nos importo y la espera mereció la pena. Repetiremos!

Muy buena experiencia, en este pequeño pueblo de la ribera. La verdad me sorprendió. No esperes un precio de ganga, es un Mesón y tiene precios como cualquier otro establecimiento en una ciudad más grande, ya que dispone de una carta elaborada y variada. La verdad aquí los precios están muy acorde con la calidad y la cantidad de las raciones, porque nos vamos a encontrar raciones generosas. Tienen un surtido de ensaladas muy sabrosas y en los segundos probamos los pescados. Una buena tajada de bacalao al pil-pil exquisito y fuera de carta, la merluza del chef impresionante (siento la foto que ya estaba empezado el plato). Todo en su punto y con sus salsas bien presentado. Muy ricos también los calamares en su tinta y sin desmerecer al típico plato de huevos fritos con patatas y morcilla burgalesa, que se pidieron los niños. Mención especial sus croquetas caseras de jamón y la de bacalao. Han recibido premios por mejor tapa, y doy fe que ambas están riquísimas. La carta de carnes tiene muy buena pinta, otra día nos acercaremos a probarla. Si te gusta la cocina castellana y bien elaborada, aquí comerás muy bien. Y siempre acompañado de un buen vino Ribera del Duero, que no falte. Los postres son los típicos caseros pero también riquísimos: tarta de queso, flan, arroz con leche. Aunque yo me pedí un postre que había un contraste entre chocolate caliente y helado frio, muy original. El servicio de 10, amabilidad, buena atención y pendientes de que todo estuviera correcto. El local está limpio, había buen ambiente y la decoración es la típica castellana, acogedora y original pues es un lagar antiguo, que conserva la viga, el husillo, la piedra... Fuera tiene una pequeña terraza cubierta. Y hay un aparcamiento al entrar y luego al fondo, para que no tengas problema de estacionamiento. Lo recomiendo sin lugar a dudas, hoy día es difícil encontrar sitios que la calidad/cantidad sea acorde con el precio y encima quedes satisfecho.

Solo fui a probar las tortillas. Y aunque para mí gusto la tortilla de patata estaba un poco sosa, estaba muy buena y cuajada como me gusta. La de morcilla y pimiento de 10.

Todo exquisito y las croquetas un lujo. Primer premio Croquetea X Burgos. Y su morcilla inmejorable, su tortilla para quitar el hipo, el solomillo y el bacalao como siempre. DE PRIMERA

Servicio rápido, amable y profesional. Tienen menú del día, un menú especial y también una amplia carta con bastantes opciones interesantes. Todo lo que probamos estaba muy rico y bien presentado. Excelente relación calidad-precio. Totalmente recomendable.