Buena calidad de la comida en general. Sin embargo, en mi plato de calamares había un trozo de cáscara de almeja y restos de gambas. Se aparta y ya, no hay problema pero hay que tenerlo en cuenta.
Servicio atento en todo momento.
Buen restaurante en el corazón de La Alhambra, casi llegando a la entrada del Generalife. Es uno de esos lugares bucólicos a los que siempre apetece ir ya que ofrece al viajero una sensación única al estar rodeado de la naturaleza envolvente del monte en el que reposa La Alhambra.
El ambiente es espectacular y el trato del personal es impecable; cercano pero sin ser agotador o impertinente como en otros lugares del centro de la ciudad.
La comida está muy bien y cuidan el producto. Tengo, a nivel particular, una predilección especial por las puntillitas pero todo está muy logrado. La limpieza de zonas tanto exteriores como interiores también tiene otro punto ganado. Los baños limpios en general.
Fenomenal. Una sopa andalusí y un rabo de toro espectacular. Nos quedamos a comer después de ver la Alhambra y lo mejor que pudimos hacer. Así puedes volver a entrar. Una muy buena idea tener un restaurante tan bueno al lado de la Alhambra.
Si has subido andando desde el centro de Granada (recomiendo por el Paseo de los Tristes), te lo mereces, sobre todo si ese día hace calor (como fue el caso). Para toda la gente que había tuvimos suerte de conseguir una mesa alta y nos atendieron enseguida. Era muy temprano para comer siendo español, pero la croqueta que nos dieron de tapa no estaba mal. Muy recomendable para un refrigerio (la comida tenía buena pinta).
Para un restaurante al lado de la Alhambra, confieso que esperaba algo peor. La comida está cara, por supuesto, pero el servicio fue rápido (aunque el sitio estuviera muy muy lleno) y no hubo ningún problema con los pedidos. Pedí un Salmón a la plancha por 20 euros que no estaba mal pero era muy pequeñito -- mi novia pidió la Alpujarreña esta que era más barata y la porción era más generosa. En general, ya he comido en restaurantes al lado de sitios turísticos que fueron muy, muy peores.
En un enclave magnifico junto a las murallas de la Alhambra.fuimos unos amigos y la atención fue rápida, y muy atentos. La comida bastante buena, y el precio razonable teniendo en cuenta la ubicación y el trato. Los platos están bastante bien sin ser excesivos pero rica y bien presentados, en definitiva un restaurante para visitar.
Justo después de visitar la Alhambra debajo del complejo histórico fuimos a La Mimbre. Me lo recomendó una amiga de Granada. Tiene una terraza súper agradable que no pretende nada y tiene un servicio muy atento, unos precios muy buenos y una calidad precio interesante. Tiene unos platos, combinados estupendos y una buena cerveza. Es muy recomendable.
Francisco Jose Perez Zamarron
+5
Un lugar mágico, maravilloso. Un 10 para nuestro camarero Cristian.
Comida bastante bueno y precio/calidad equilibrado.
Servicio un 3 porque aún que nos hayan tratado genial es muy difícil comunicarse con cualquier camarero ya que van “ locos “ con tanta gente.
Ambiente un 5, ambiente granaino y Alhambra.
Lisandra González Cárdenas
+5
El desayuno muy rico. Las tostadas y el café no decepcionan. Queda justo antes de entrar a la Alhambra. Un desayuno ahi para comenzar el tour te dejará listo para todo el dia.
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