Le Top !!!! N'hésitez pas la moindre de seconde a venir dans cet endroit gustativement magique. C'est vraiment le temple du 'fait maison' mais pas que... Le personel est également à la hauteur de la cuisine, animations musicales 'live' en saison et pour les amoureux de la bière (et oui, je suis belge), essayez La Puchero qui est elaborée dans le village. En resumé, un endroit a connaitre et faire connaitre...
Fantástico!! Recomendable 100%!! Nos la podéis ir sin probar sus champiñones rellenos!!
El sitio está en plena naturaleza y cuenta con una terraza amplia con vistas preciosas!! La comida es casera y muy rica, los champiñones, las migas y los postres super recomendables!!! Además nos pusieron una tapa de paella con la primera bebida. El servicio atento y muy agradables. Se puede aparcar bastante bien cerca.
Merendero clásico en plena naturaleza totalmente recomendable.
Tiene una terraza amplia, dos salones con chimenea y un parking amplio.
A destacar los champiñones asados y el vino de la casa.
El servicio fue lento, pero era domingo y estaba a tope.
Sitio muy agradable y acogedor. La comida casera, rica y abundante. Los champiñones rellenos deliciosos . Pedí el conejo a la brasa y te ponen medio conejo literalmente y cayó entero de lo sabroso que estaba. La carne en salsa buena y super tierna. Y los postres que decir, la tarta de arroz con leche y la de chocolate de rechupete. Y para rematar el trato muy bueno y los precios muy razonables.
Restaurante de comida casera riquísima y abundante, se nota que usan productos de la tierra, frescos y de calidad. Las verduras riquísimas y la carne a la brasa espectacular y el remate unos postres caseros que ya quisieran algunos estrellas michelin.Por último resaltar el trato del personal gente sencilla y amable que te hacen sentir como si estuvieras en tu casa. Vamos todo un acierto repetiremos seguro, muchas gracias por llenarlos la barriga con estos manjares.
Comida casera muy rica y a buen precio, con tapas abundantes y sabrosas. Siempre que voy se respira un ambiente familiar, con camareros amables y simpáticos.
Tienen una terraza muy agradable para los días de sol, y salón con chimenea si hace frío, todo muy acogedor.
Sitio para volver una y otra vez.
Recomiendo los champiñones rellenos y las croquetas caseras, ¡no he probado nada igual!
Un lugar con un encanto único para disfrutar de un buen momento. La comida es casera y exquisita, el personal es inmejorable y las vistas tan bonitas hacen que venir a este restaurante sea siempre una buena elección.
Fui para escuchar un grupo de música de tango, pero no fue lo que me esperaba. Me encanta el tango y uno de los instrumentos oficiales es el bandoneon... pues no lo tenían. La comida muy demorada, esperamos mucho por un plato. Y las cervezas de barril las sirven muy por debajo, yo lo digo porqué he trabajado de camarera, además no las sirven a la misma distancia del borde de la copa, y se ve mal eso. Es protocolo de servicio. Ves varias copas en la mesa a diferentes cantidades. No sé si tengan jefe de servicio o capitán de camareros, pero se nota que les falta un líder. Alguien que los ponga a marchar en regla.
Un lugar con muy buenas vistas y una estupenda terraza soleada.
Camareros muy simpáticos y comida bastante buena, aunque la paella de la tapa estaba algo seca y son mucho sabor.
La tarta de queso exquisita.
Jose Antonio Roldan Pastor
+4
Sitio con buenas vistas, camareros atentos y comida muy rica
Tienen una amplia carta con todo tipo de platos tradicionales y más modernos, el personal es de 10 y las vistas impresionantes. Por poner una pega diría que los postres,ya que el único que realmente me gustó fue la tarta de chocolate.. sin embargo todo los demás platos estaban buenísimos! Volveremos!
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