Casa Enrique

Fuimos a cenar. La taberna estaba llena para el tapeo pero tienen una zona interior con mesas donde puedes comer y estar tranquilo. Pedimos varias raciones. Todas muy buenas. Destaco el lomo de orza, pero todas las que pedimos estaban excelentes. La camarera nos atendió muy bien. Recomiendo probar los vinos tintos de Granada si quieres experimentar con algo distinto al Rioja o al Rivera. Precios dentro de lo que es la media de la zona.

Lo conocemos desde 1992, estuvo un tiempo cerrado y ahora, con motivo de ir a esquiar vemos que ha reabierto. Este local es de lo mas genuino de Granada, con origen en 1870. Mantiene ese sabor tradicional y excelsa calidad en lo que ofrece. Anteriormente era solo servicio de barra, vinos, tapita o raciones, ahora ha abierto en la parte trasera un espacio con mesitas, donde puedes degustar todos sus buenos productos, especialmente los embutidos, jamón al corte....puedes pedir medias raciones y a un precio moderado. Conviene reservar. El responsable, no recuerdo el nombre, es atento y muestra su conocimiento en este negocio. Volvimos otro día, un viernes, donde a las 9 de la noche dispone de música en directo con algún "artista", en este caso de guitarra clásica, que resultó un SEÑOR oriental, con temas de Falla, Tárrega, Albeniz, Paco de Lucía.....excelente. Solo un pero, que este señor no merece que esté tocando y el personal cenando, yo haría un impass en la comida y mostrar la atención que se merece quién actúe, no es música ambiental, que por otra parte, el responsable la tiene puesta contínuamente, a tono muy agradable, así como el temario, flamenco, jazz, Soul, Blues....se agradece. Pocos restaurantes como este te encontrarás en Granada, pequeño, pero, repito, con mucha calidad en todo. Grupo de Bilbao

Taberna antigua típica de Granada. Muy cerca de Puerta Real. No tiene taburetes en el interior para sentarse, pero han puesto ahora una terraza fuera. Buena cerveza muy fria, y variedad de vinos. Te ponen tapa con cada bebida. El vermut casero es típico. Buenos embutidos y tapas frias. Ideal para el aperitivo

Lugar totalmente recomendable. Desde que la conocimos siempre que vamos a Granada no falta la visita en en esta taberna. Esta última vez, en Enero se la hemos descubierto a unos amigos de la ciudad que no la conocían, no lo entiendo 🤣y luego el día 15/01 repetimos sólo nosotros comiendo antes de volvernos a nuestra localidad. Normalmente no ponemos reseñas pero ese día las dos personas ( una mujer y un hombre)que nos atendieron en la comida fueron súper amables, no sabemos los nombres, en la factura indica María del Valle no sabemos si es una de las personas que nos atendió o no, porque no preguntamos cómo se llamaban , pero les queremos dar las gracias por cómo nos atendieron. Siempre hemos estado muy a gusto pero ese día nos sentimos especialmente bien, no sabemos si porque al no ser fin de semana podían estar más por el cliente que cuando hay tanto trabajo pero tampoco tenían ninguna obligación y se les veía que le gustaban y disfrutaban de su trabajo y el trato para nada era forzado. Dar especialmente las gracias a esas dos personas que nos hicieron sentir como en casa y por el detalle de amabilidad que tuvieron para nosotros. Nos vemos a la próxima.

En la acera del Darro nos encontramos con esta emblemática taberna con la cual me quedé muy sorprendida ya que no me esperaba que tuviera un comedor, aunque pequeñito, pero al fondo donde poder comer. Creía que solamente se podía estar en la barra o en los barriles de la calle. Es una taberna antigua, con lo cual no podemos exigir que tenga muebles modernos ni nada de eso, así como en el cuarto de baño, la cisterna te sorprende porque es todavía de la de tener que tirar de toda la vida Nos trataron muy bien y nos pusieron tapa con todas las bebidas que tomamos aparte de la raciones que estaban muy buenas. Las tapas no son nada del otro mundo, pero compensa por estar en una taberna de ese tipo.